Julia Wandelt, de 24 años, insistía en que era la niña británica desaparecida en 2007 en Portugal.
Relató ante la Justicia británica el calvario que vivió junto a su familia por el acoso de Julia Wandelt, una joven polaca que insiste en ser Maddie pese a que las pruebas de ADN lo desmintieron.
Recién liberado de prisión, el alemán aseguró tener pruebas que podrían “terminar con el escándalo del siglo” y volvió a encender las alarmas en torno a la desaparición que conmovió al mundo.
La Justicia alemana ordenó su salida de prisión por falta de pruebas, aunque el fiscal advierte que sigue siendo “peligroso”.
Podría ser la última oportunidad de evitar que el principal sospechoso de la desaparición recupere su libertad.
Se sospecha que los padres de la niña desaparecida podrían correr riesgo.
Luego de que la Justicia terminara las investigaciones en 2008, la propiedad tuvo un destino sorprendente.
Los antecedentes de operaciones estéticas de Brueckner siembran las dudas respecto a sus cicatrices corporales.
La Policía Metropolitana de Londres dispuso en 2011 una línea pública para quienes quisieran aportar información a la investigación. Ayer un testigo dio a conocer uno de los mensajes del contestador…
El hombre fue visto por primera vez en público durante el juicio por crímenes sexuales.
Un testigo hizo una declaración que complicó más al principal sospechoso.
Helge Busching, examigo de Christian Brueckner, había aportado un testimonio con clave y ahora amenaza con dejar de colaborar con la investigación.
La nueva información cambiaría una de las hipótesis del caso.
El niño de dos años fue visto por última vez el sábado pasado mientras jugaba en la casa de sus abuelos.
Hegel B, un ex amigo del principal sospechoso de la desaparición de la niña, reveló que vio videos del imputado en donde dejó registrados varios de sus delitos
Christian Brueckner tiene numerosas causas que lo imputan por abusos sexuales y es el principal acusado por la desaparición de la niña.
La Justicia de Portugal retomó las investigaciones a 16 años de que la niña de tres años desapareciera del departamento.
La justicia alemana sospecha que Brueckner estuvo implicado en la muerte de la menor británica.
El alemán Christian Brueckner sostuvo que es inocente y aseguró ser una víctima de abuso en la cárcel.
Un sospechoso, un nuevo espacio y nuevas pistas. Así evoluciona la búsqueda en el caso Madelein McCann.
