17 Junio 2008
* Pese a la falta de combustibles, cientos de tucumanos sacaron el auto para protestar contra el Gobierno nacional. Con las balizas puestas, algunos embanderados, solos o con toda la familia, se dirigieron a plaza Independencia para hacer sonar la bocina frente a Casa de Gobierno.
* También de a pie y con cacerolas en las manos, botellas plásticas, tambores y silbatos participaron decenas de vecinos que desde barrio Sur y barrio Norte. Otros muchos, a falta de herramientas, caminaban aplaudiendo. “Venimos porque estamos cansados de la política nacional”, dijeron Benjamín, empleado de comercio, y su novia.
* “Estoy aqui con toda mi familia porque queremos que se vaya esta dirigencia. No tenemos nada que ver con los productores pero hay que reconocer que vivimos del campo”, afirmó Georgina, una comerciante de 37 años. “Creo que hay una actitud muy soberbia. Vengo porque me indignó el discurso que dieron Aníbal y Alberto Fernández. Me dejaron la impresión de que no tienen capacidad para resolver el conflicto y, por cómo están las cosas, se nota que es así”, sostuvo Ana Lía Mahmoud, docente.
* Otros hicieron su aporte a la marcha desde casa. Colgaron banderas y se asomaron con ollas a los balcones. Hay quienes sumaron afiches, como los colocados en un edificio de Salta y San Juan que decía “Fuera Cristina” y “Queremos un gobierno que piense en el pueblo”. En la vereda de Monteagudo al 400, los vecinos de los edificios se reunieron en grupo a hacer sonar sus cacerolas.
* Aunque estaban en horario de trabajo, Francisco y Hugo, cocineros de una pizzería de barrio Norte, dejaron sus tareas y salieron a la calle. “Queremos que se termine el conflicto, que el Gobierno encuentre como sea la solución, que deje de esquivar los problemas”, dijeron a LA GACETA.
* El bocinazo en la plaza provocó grandes embotellamientos: en 25 de Mayo primera cuadra hasta Santiago; San Martín desde el 200 al 500, Rivadavia desde San Martín hasta San Juan, 24 de Septiembre desde el 300 hasta el 800, y Buenos Aires primera cuadra.
* También de a pie y con cacerolas en las manos, botellas plásticas, tambores y silbatos participaron decenas de vecinos que desde barrio Sur y barrio Norte. Otros muchos, a falta de herramientas, caminaban aplaudiendo. “Venimos porque estamos cansados de la política nacional”, dijeron Benjamín, empleado de comercio, y su novia.
* “Estoy aqui con toda mi familia porque queremos que se vaya esta dirigencia. No tenemos nada que ver con los productores pero hay que reconocer que vivimos del campo”, afirmó Georgina, una comerciante de 37 años. “Creo que hay una actitud muy soberbia. Vengo porque me indignó el discurso que dieron Aníbal y Alberto Fernández. Me dejaron la impresión de que no tienen capacidad para resolver el conflicto y, por cómo están las cosas, se nota que es así”, sostuvo Ana Lía Mahmoud, docente.
* Otros hicieron su aporte a la marcha desde casa. Colgaron banderas y se asomaron con ollas a los balcones. Hay quienes sumaron afiches, como los colocados en un edificio de Salta y San Juan que decía “Fuera Cristina” y “Queremos un gobierno que piense en el pueblo”. En la vereda de Monteagudo al 400, los vecinos de los edificios se reunieron en grupo a hacer sonar sus cacerolas.
* Aunque estaban en horario de trabajo, Francisco y Hugo, cocineros de una pizzería de barrio Norte, dejaron sus tareas y salieron a la calle. “Queremos que se termine el conflicto, que el Gobierno encuentre como sea la solución, que deje de esquivar los problemas”, dijeron a LA GACETA.
* El bocinazo en la plaza provocó grandes embotellamientos: en 25 de Mayo primera cuadra hasta Santiago; San Martín desde el 200 al 500, Rivadavia desde San Martín hasta San Juan, 24 de Septiembre desde el 300 hasta el 800, y Buenos Aires primera cuadra.
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