Banco Central: en estado reservado

Los dólares queatesora el Banco Central de la República Argentina (BCRA) están en estado reservado. Septiembre ha marcado a fuego la situación de la entidad que presidente Mercedes Marcó del Pont. El mes pasado, la autoridad monetaria tuvo una pérdida cercana a los U$S 1.830 millones en sus reservas que, por estos días se ubican en U$S 34.600 millones. 

La falta de divisas obligó al Banco Central a volcar cientos de millones de dólares de sus reservas en el mercado cambiario para financiar el comercio exterior. La entidad también le gira fondos al Tesoro para que el Estado pague sus vencimientos de deuda en moneda extranjera. A tal punto que el Central se ha consolidado como el primer organismo estatal en el listado de emisores de deuda pública, con más de U$S 10.300 millones.

La demanda de dólares seguirá elevada en la medida que no haya expectativas de moderación inflacionaria. Este es el problema central, advierte el economista Eduardo Robinson. Si se espera que el peso continúe devaluándose en relación al dólar, a menor o mayor ritmo, si hay escasas alternativas de ahorro en el país que le ganen a la inflación, si el gobierno cada vez demanda más dólares, las reservas no se recuperarán, advierte el experto.

El prorrogado blanqueo de capitales, hasta fines de año, tiene como uno de sus principales fines recaudar para engrosar las reservas de divisas e impulsar el sector inmobiliario, deteriorado desde la aplicación a fines de 2011 de las restricciones al mercado cambiario, así como el de energía, consigna la agencia DPA. A su vez, aspira a bajar la presión en el mercado de cambios paralelo, en el que el dólar ilegal cotiza más de un 60% por encima del valor oficial de la divisa, $ 5,79, tras alcanzar meses atrás una brecha del 100%. En esa orientación y debido a los vencimientos de deuda que se vienen, el BCRA necesita imperiosamente consolidar las reservas internacionales.

Los efectos que deja la pesificación forzosa
Desde 2012, el Gobierno nacional aplicó la denominada pesificación forzosa de la economía. Esto, según Robinson, causó debilidad del sector inmobiliario, desorden en el mercado cambiario, instalándose de hecho un esquema de múltiples tipos de cambio, oficial, paralelo o tarjeta; también debilidad del sector productivo dependiente de las importaciones y más pérdidas de reservas.

El cepo siempre es la principal alternativa 
De acuerdo con la visión de los analistas, tras las elecciones es posible que el Gobierno profundice las restricciones para acceder al dólar. Encarecerá el turismo al exterior, más restricciones para importar y más combativo con las versiones dólar no oficial. Esto afecta a la economía en la medida que no se sabe a qué valor se importará o se exportará, si se podrá efectuar compras de equipamiento.