SESIÓN ÁSPERA. A un mes de los comicios, la oposición criticó el pedido de licencia aunque pocos la rechazaron.
Jornadas con discursos calientes y acusaciones tormentosas que levantarán polvareda. De ese modo se pronostica el clima electoral de estos 30 días finales de campaña, según se desprende de lo ocurrido ayer en la Legislatura. La oposición se despachó con dureza en el recinto contra la candidatura testimonial del gobernador Osvaldo Jaldo, durante la aprobación de su pedido de licencia. El oficialismo, por mandato de bloque, se guardó los comentarios de tribuna entre las bancas. Pero afuera rechazó las acusaciones y se despachó con dureza, en especial contra aquellos que ejercen la doble candidatura o las testimoniales en los comicios desde hace tiempo.
Desde hoy y hasta el 26 de octubre -inclusive-, el vicegobernador Miguel Acevedo estará a cargo del Poder Ejecutivo (PE). Pero ayer, en su carácter de presidente de la Cámara, comandó la sesión especial que tuvo como único tema del día la presentación de Jaldo para suspender sus responsabilidades institucionales y dedicarse de lleno a la campaña del frente Tucumán Primero, que lo tiene como primer candidato a diputado. El permiso fue aprobado -a mano alzada- por 33 votos a favor, cuatro negativos (Ricardo Bussi, Eduardo Verón Guerra, Manuel Courel y José Macome) y seis abstenciones (Walter Berarducci, José Cano, Silvia Elías de Pérez, Agustín Romano Norri, Alfredo Toscano y Claudio Viña), según se informó por Secretaría.
En la nota de pedido, Jaldo remarcó que su licencia no es obligatoria, pero que su voluntad era diferenciar su ejercicio del cargo como gobernador con la actividad electoral. Remarcó que en los 30 días que corren desde hoy no recibirá sueldo ni bonificación de ninguna naturaleza vinculada a su cargo en el PE. “Espero que sea interpretada esta solicitud como una decisión de respeto a la ciudadanía y a las instituciones (...), garantizando que la gestión continúe con normalidad y sin parálisis ni dilaciones en decisiones de Gobierno”, expresó.
No es Netflix
La Cámara fue puesta en comisión para abordar el tratamiento. Gerónimo Vargas Aignasse pidió que se dé dictamen a una cuestión personal que no tiene impacto en leyes ni en la Constitución. Pero la oposición salió a la carga del primer candidato del frente oficialista, el cual confirmó que retornará el 27 de octubre a su cargo como gobernador; es decir, que no asumirá como diputado, de resultar electo.
Bussi disparó que la licencia de Jaldo “atenta contra la institucionalidad” por abandonar el mandato popular durante 30 días. “Están engañando a la gente: le ofrecen un producto y el resultado es otro producto”, dijo. Courel consideró que la candidatura de Jaldo “roza la ilegalidad o cuanto menos es ilegítima”. Mencionó que la Constitución de la Nación, en su artículo 73, que fija que los gobernadores no pueden ser miembros del Congreso. “Que se postule es un fraude electoral. Es un engaño para los tucumanos. Es una estafa electoral”, expuso.
Viña mencionó que “las candidaturas testimoniales erosionan la calidad de gobierno” e ironizó con que es para celebrar que el pedido de licencia no llegó por DNU. Elías de Pérez chicaneó con que el gobernador entendió al revés la máxima peronista: “primero Jaldo, después el movimiento y al último la patria”. Agregó que gobernar no es una película de Netflix, que se puede pausar y volver después.
Cano, en tanto, reprochó la candidatura testimonial y resaltó que Unidos por Tucumán es el único espacio político que hizo una presentación judicial en contra. “Todo lo que se diga acá y sin actuar en consonancia es usar el recinto como tribuna”, desafió a sus pares opositores.
El malestar en el oficialismo era evidente, pero obedeció el mandato de bloque. De todos modos, Vargas Aginasse pidió una interrupción y no dejó pasar su preocupación porque llevaron el discurso al terreno de la ética. “Hay legisladores que han sido testimoniales, con doble candidatura, que han puesto a sus hijos en las listas. Con la bragueta bajada es difícil predicar la ética”, expuso ofuscado. Roque Tobías Álvarez, por su parte, aclaró que el peronismo no está engañando al electorado porque todo el mundo sabe que Jaldo retomará sus funciones como gobernador.
Lo que se dijo por la licencia de Jaldo
“Me alejo del cargo para no mezclar gobierno y política”
El gobernador Jaldo explicó los motivos que lo llevaron a pedir licencia, a pesar de que la legislación electoral no se lo exige. “No se puede gobernar y hacer política al mismo tiempo. La Constitución prevé esta posibilidad y es lo más transparente para todos”, afirmó el titular del frente Tucumán Primero. El mandatario aclaró que seguirá acompañando la campaña, pero sin utilizar recursos del Estado ni ejercer funciones públicas. “No quiero que el ciudadano crea que el gobernador está haciendo campaña desde el gobierno. Por eso, me alejo del cargo durante este mes”, remarcó. Confirmó que retomará sus funciones el lunes 27 de octubre y que, mientras tanto, mantendrá contacto permanente con Acevedo durante su licencia. “Vamos a seguir tomando decisiones juntos”.
“Es un engaño a la ciudadanía”
Macome expresó su rechazo al pedido de licencia de Jaldo. “Esta maniobra no es solo una candidatura testimonial, sino también un engaño a la ciudadanía y al sistema democrático”. En ese sentido, sostuvo que las elecciones legislativas “son para elegir nuestros representantes en el Congreso, no encuestas para 2027 ni listas de liderazgos. Desde esta banca nos pronunciamos negativamente, porque creemos que se debe respetar el verdadero sentido de las elecciones intermedias”, remarcó.
Vargas Aignasse tildó de hipócritas a legisladores opositores
El legislador se despachó contra los opositores que pusieron en tela de juicio la candidatura de Jaldo. Notoriamente ofuscado por las alocuciones, cargó contra Courel, Bussi y Viña, entre otros. “La propia Cámara Nacional Electoral habilitó y convalidó la candidatura de Osvaldo Jaldo. Resultaría absurdo pensar que los jueces federales desconocen o malinterpretan el texto constitucional”, dijo en un comunicado. Agregó que hay legisladores que hicieron uso de la doble candidatura, que llegaron por otros candidatos testimoniales (mencionó a Campero) o que incluyeron en las listas a sus hijos o parientes. “Pretender erigirse en guardianes de la virtud desde el vicio consuetudinario es, sin dudas, la peor forma de hipocresía”, cuestionó.
“Si quiere hacer bien las cosas no debería ser candidato”, dijo Sánchez
“Lo único novedoso de la licencia de Jaldo es que estará fuera de un cargo por primera vez en 40 años. Si quiere hacer bien las cosas, no debería ser candidato”, dijo el candidato de Unidos por Tucumán Roberto Sánchez. Y continuó: “todo lo demás es pura cáscara, una puesta en escena para mostrarse respetuoso de la república cuando lo único que hace es avasallarla. Si tanto apego tiene por la transparencia y las reglas de juego claras, no debería ser candidato testimonial; no tolera estar sin los privilegios que le da su condición de funcionario. Es lo que hizo en las últimas cuatro décadas”.
“Históricamente tienen dobles candidaturas”, criticó Leito
El justicialista Mario Leito remarcó que aunque quisieron fijar una posición en el recinto, optaron por respetar el mandato de bloque. De todos modos, arremetió contra los parlamentarios que pidieron la palabra en el recinto. “Curiosamente, algunos que hablaban de engaño electoral cuando ellos históricamente en la provincia de Tucumán tienen doble candidatura siempre”, disparó.










