Histórico: la Argentina importará azúcar

Las entidades que agrupan a los principales ingenios argentinos anticiparon que deberán ingresar el producto del exterior para poder garantizar el fraccionado. Impacto de la especulación, ante precios internos que no paran de subir.

24 Noviembre 2010
La escasez de paquetes de un kilo en las góndolas fue determinante para que el sector azucarero argentino tomara una decisión histórica: la importación del producto. Si bien no trascendieron los volúmenes que los principales ingenios del país harán ingresar desde el exterior, se informó que se comprará el azúcar que haga falta para abastecer la demanda interna, de 140.000 toneladas mensuales. La medida fue anticipada a LA GACETA por los presidentes del Centro Azucarero Argentino (CAA), Fernando Nebbia, y del Centro Azucarero Regional de Tucumán (CART), Julio Colombres. Los industriales dejaron en claro que los ingenios suministraron el azúcar necesario para el normal funcionamiento del mercado, y alertaron que la restricción en la oferta está directamente vinculada con problemas en el abastecimiento de azúcar fraccionado. "El azúcar ingresará a un precio muy competitivo, con los valores del mercado internacional", destacó Nebbia. El precio interno del azúcar no deja de subir, y se ubica en los $ 200 la tonelada, lo que desactiva la barrera arancelaria que protege al producto argentino en el Mercosur. Desde fines de los 80 no se importaba el producto. La posibilidad de que se fomente el ingreso de azúcar del exterior había sido advertida semanas atrás por el secretario de Comercio Interior, Guillermo Moreno, quien, a poco de haberse iniciado la última zafra, había restringido las exportaciones del producto a sólo 150.000 toneladas de azúcar hasta el 30 de septiembre, para garantizar el suministro interno. Luego amenazó con frenar definitivamente la venta externa y con habilitar el ingreso del producto de Brasil si no mejoraba la oferta en la plaza nacional. "El tema es que la demanda de azúcar es muy elevada porque alguien no está vendiendo", destacó Colombres. El mensaje más importante es que hay azúcar, y que sentarse encima del producto para especular pone en riesgo toda la actividad", remarcó Colombres. El economista Ernesto Cerro, ex asesor del CART, opinó que la medida podría sentar un precedente negativo.

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