Donald Trump lo anunció ayer y acusó al organismo internacional de estar controlado por China y de haber facilitado la propagación del covid-19 por todo el mundo.
El país más afectado por la pandemia vive violentas protestas tras el asesinato de un afroamericano por parte de la Policía. Twitter silenció a Trump por “glorificar la violencia”.
"Redirigiremos esos fondos a otras necesidades de salud pública mundial urgentes y globales", afirmó el mandatario.
Un desconfinamiento prematuro puede causar “muertes y sufrimientos”, dijo el asesor de la Casa Blanca para la pandemia.
El gobierno de Trump impulsa un nuevo enfrentamiento sobre el virus, que ya causó 275.000 muertes en el mundo.
Lo hizo luego de que China intentara mencionar en la resolución a la Organización Mundial de la Salud, aunque afirma que no rechaza la resolución.
El Presidente sigue desoyendo recomendaciones de las autoridades sanitarias de evitar las aglomeraciones e incluso ha dicho que el fin de semana hará un asado para decenas de invitados.
Se trata de una asistente del vicepresidente de Estados Unidos, Mike Pence.
Uno de sus asistentes personales está infectado por la covid-19.
Critican el manejo de información sobre la propagación del virus que hizo el país asiático.
Un modelo proyecta 134.000 decesos por covid-19 en el país. La estimación previa era de 72.433.
Las compañías dijeron que compartirán la información solamente con las autoridades de salud. Se usa para detectar encuentros.
Los funerales no pueden hacerse con presencia de los deudos y no se puede velar los cuerpos.
La Unión Europea cuestionó la decisión de Estados Unidos. Alemania advierte que las acusaciones “no ayudan”.
El presidente de Estados Unidos aseguró que "la OMS falló en obtener, chequear y compartir información rápidamente" y acusó a la organización de "no cumplir con sus obligación básicas".
El ritmo de contagios se desaceleró en una importante parte de Asia y Europa, incluyendo a países muy afectados, como Italia, España, Francia y Alemania.