Ante la inflación, las familias argentinas siguen restringiendo sus gastos

Ante la inflación, las familias argentinas siguen restringiendo sus gastos

Según una encuesta, la mayoría piensa y es más responsable a la hora de comprar. Casi la mitad desembolsa todo lo que gana en el mes.

Compra con tarjeta. FOTO ILUSTRATIVA Compra con tarjeta. FOTO ILUSTRATIVA

El comportamiento de la inflación pone entre la espada y la pared a los argentinos. Mientras algunos intentan anticiparse al incremento de los precios, otros no encuentran la manera de financiar sus compras ante la caída del poder adquisitivo que ha implicado un empobrecimiento de la clase media tradicional. 

Las consultoras privadas estiman que el Índice de Precios al Consumidor (IPC) de mayo oscilaría entre el 8,5% y el 9%, una tendencia que se mantiene en los últimos meses y que implicará que, transcurrido la mitad del año, el Gobierno se encontraría con una inflación del 60%, el cálculo anual que se había realizado originalmente en el Presupuesto Nacional 2023. 

Hay dos cuestiones que tendrán peso en el cálculo inflacionario: el incremento del valor del dólar libre, registrado en los últimos días de abril, pero con incidencia en mayo, y el reajuste en las tarifas de los servicios de mayor consumo social. 

La desaceleración de los precios está lejos de alcanzarse, mientras crece la proyección de que la inflación argentina se ubique en torno de un 130% anual. Las familias argentinas, en este contexto, tendrán menos disponibilidad para ahorrar y para costear los alimentos, porque el costo de vida se encarece por el lado de las tarifas que, según los expertos siguen atrasadas, y porque no hay un horizonte de estabilización de la economía para el mediano plazo.

Como consecuencia de este fenómeno, las compras por impulso parecen estar reduciéndose significativamente en Argentina, según un estudio de Quiddity, una agencia de investigación de mercado y opinión. 

En este sentido, el 54% de los entrevistados comentaron que se inclinan por un consumo más pensado y responsable. Incluso, el 44% agrega que quiere vivir de un modo más minimalista, es decir vivir con lo esencial.  A la hora de planificar gastos, se percibe un mayor interés en actividades fuera del hogar sobre todo aquellas vinculadas con las experiencias. Es así que el 59% planifica invertir su dinero en viajes, el 41% en ir a shows y eventos y el 39% en salir a comer afuera.

“La situación económica actual marcada por la inflación claramente impacta en el estilo de vida de las personas y en cómo administran el dinero. Por eso, ver que los hábitos de consumo apuntan a ser más pensados y responsables, dejando de lado la compra por impulso, es lógico. Asimismo, luego de la pandemia, se ve una revalorización del contacto cara a cara, de disfrutar del mundo externo y de invertir más en experiencias que en objetos de consumo”, indicó Verónica Rodríguez Celín, directora regional de Quiddity.

Por otro lado, las personas que han experimentado estados emocionales displacenteros como ansiedad y preocupación durante 2022 lo asocian a la situación financiera. Por eso, el cuidado de las finanzas personales es uno de los propósitos que declaran para lo que resta del año. En esta línea, el 38% menciona que en 2022 su situación financiera fue mala, el 39% la evalúa como “ni buena ni mala” y solo un 23% afirma que fue de buena a muy buena.

En cuanto a la capacidad de ahorro, el 52% de los argentinos gastan todo lo que ganan. Solo el 29% tiene capacidad de ahorro y el 19% gasta más de lo que gana. Los principales objetivos financieros de los argentinos para 2023 son: ahorrar/invertir (42%), mantenerme a mí mismo/mi familia (41%), viajar (39%) y pagar/reducir las deudas con bancos o tarjetas de crédito (29%).

“Según los datos que recabamos los argentinos tenemos peor capacidad de ahorro que brasileños, colombianos y mexicanos. Cuidar las finanzas personales en un contexto económico complejo se vuelve vital buscando reducir el consumo, enfocarse en lo esencial, buscar precios e incluso optar por segundas marcas”, agregó Rodríguez Celín respecto del comportamiento financiero en las familias de la región.

Comentarios