26 Febrero 2023
LOS RIOS, EN VEDA. No se puede pescar por falta de crecidas.
“Se trata de un período extraordinario”, explicó la encargada del área de Piscicultura de la Dirección de Flora y Fauna, Nadia Cirami. “La decisión se tomó luego de haber hecho un monitoreo de la especie en La Angostura”, explicó la funcionaria al justificar por qué se decidió vedar la pesca de pejerreyes en toda la provincia.
Ese es uno de los puntos más polémicos de este asunto. Desde que se conoció la noticia, comenzaron a circular diferentes versiones sobre el tema. Algunos funcionarios de Desarrollo Productivo extraoficialmente les informaron a los pescadores que la prohibición tenía otra finalidad: permitir que se aclimaten los alevines que fueron adquiridos en Chascomús, provincia de Buenos Aires. Pero la resolución deja perfectamente aclarado que se trata de una medida que busca proteger la reproducción natural de los ejemplares.
“Según las muestras tomadas y los comentarios de los mismos pescadores, el 50% de las hembras aún tienen ovas y los machos, semen. La otra mitad ya desovó durante la primera veda. Por eso nos vimos en la obligación de tomar esta medida”, indicó Cirami en una entrevista con LA GACETA. “Esto no significa que en los próximos días, después de analizar cuál es el cuadro de situación, se decida levantar la veda”, agregó.
Según la especialista, el retraso del desove natural se debió a los cambios climáticos. “Primero tuvimos un invierno muy crudo que atrasó el calentamiento del agua. Después fueron los calores muy intensos que impidieron que el agua se enfríe para que el ciclo reproductivo se realice con normalidad. Es por eso que recién ahora, y en una medida extraordinaria, se declaró la veda”, explicó.
Cirami aclaró que los alevines traídos desde Buenos Aires serán reservados para reproducción artificial y que recién podrían ser sembrados en agosto o septiembre.
Los aficionados a esta disciplina no están tan conformes con las explicaciones. “El fin de semana estuvimos con Esteban Orresta en La Angostura. Sacamos unos 40 pejerreyes y todos de medianos para arriba. Ninguno de ellos tenía signos de que estaban en ciclo de reproducción”, explicó Rubén Marco, reconocido pescador, operador turístico y periodista especializado en el tema.
“Los responsables de Fauna nos avisaron que ellos no habían tomado ninguna muestra, que solo sabían que los fileteadores andaban corriendo la versión de que los pejerreyes estaban con ovas. Pero aclaraban que de cada 100, solo 10 estaban empezando a tener huevitos”, indicó Marcos Lencina.
Juan Carlos Lucena es otro experimentado pescador. “No hay dudas de que el cambio climático puede generar modificaciones, pero no creo que ocurra lo mismo en todos los lugares. El clima no es el mismo en Tafí del Valle que en El Cadillal. No hay que ser diplomado para entender eso”, explicó.
Demora
Causas naturales también demoraron el ciclo reproductivo de las especias autóctonas de nuestra provincia. La pesca de dorados, sábalos, bogas, bagres y tarariras está vedada. “Se trata de especies que migran para poder desovar. La falta de crecidas de los ríos ha impedido que lo hagan, por lo que todo está demorado. No se puede pescar en los ríos tucumanos”, explicó Cirami.
En Santiago del Estero ocurre algo similar. La veda debería haberse levantado el lunes, pero decidieron estirarla hasta nuevo aviso, ya que los ríos Dulce y Salado no crecieron lo suficiente para que las especies desarrollen su ciclo reproductivo.
Sin embargo, después de muchas idas y vueltas, las autoridades de la vecina provincia decidieron aclarar algunos puntos de la medida. Sólo está autorizada la pesca deportiva, es decir, se captura un pez, sin importar la especie, con devolución.
También se dispuso la autorización del sacrificio de un ejemplar de las especies permitidas (boga, bagre, sábalo y tararira) por persona para que sirvan como alimento en el lugar de pesca. Está totalmente prohibido el transporte de pescado.
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