Dictaron la veda de pesca y estalló la polémica

Dictaron la veda de pesca y estalló la polémica

Hasta el 31 de marzo no se podrá capturar pejerreyes en la provincia. Malestar entre deportistas, operadores y empresarios.

Fue una medida que causó sorpresa e indignación. Los pescadores tucumanos debieron guardar sus cañas por una insólita e histórica veda impuesta por la Dirección de Flora y Fauna. Los funcionarios dieron a conocer una resolución por la que se prohibió la actividad en El Cadillal, La Angostura y Escaba, que se agrega a la imposibilidad de capturar cualquier tipo de pez en los ríos de la provincia.

La noticia generó sorpresa en el ambiente. Primero porque fue firmada el 17 de febrero, pero informada el martes 21. “Nadie sabía nada y todos los lagos estuvieron llenos de pescadores por el fin de semana largo. Es una locura lo que hicieron”, argumentó Mario Rodríguez, uno de los deportistas que habitualmente concurren a ese espejo.

“El área de Piscicultura fundamenta su pedido en la necesidad de lograr el óptimo repoblamiento natural para facilitar el desarrollo del inicio de la campaña de desove del año 2023, disponiendo restricciones a las actividades extractivas y evitando impactos negativos en los ambientes naturales”, se puede leer en la resolución que prohíbe la pesca del pejerrey en esos tres ambientes desde el 20 de febrero al 31 de marzo inclusive.

Por primera vez en la historia de la provincia se realiza una veda de pejerrey en esta época del año. En temporadas anteriores, por condiciones climáticas, primero se tomaba la medida en El Cadillal y Escaba y después en La Angostura porque el ciclo reproductivo no era el mismo. Luego se tomó la modalidad de lanzar la medida en todos lados al mismo tiempo. El año pasado, por ejemplo, comenzó el 15 de septiembre y culminó el 3 de diciembre. No pasaron tres meses de esa resolución y se lanzó otra medida similar.

“No conocemos los fundamentos técnicos que llevaron a dictar esta nueva veda. Esperamos que las autoridades nos den una explicación clara sobre qué está pasando”, señaló Diego Lobo, uno de los máximos referentes del grupo de la Mesa de Pesca de Tucumán. “Tomar una decisión en esta época del año genera numerosos inconvenientes a las personas que viven de esta actividad y se da en tiempos en que muchísimas personas aún están disfrutando de sus vacaciones”, añadió el directivo del Yacht Club y reconocido pescador.

Este grupo es llamado coloquialmente así, pero su verdadero nombre es Mesa de Desarrollo de Acuicultura y Aprovechamiento lctícola. Fue creado por decreto el 9 de noviembre de 2022, con el incondicional apoyo del por ese entonces gobernador Osvaldo Jaldo, y está integrado por representantes del Ministerio de Desarrollo Productivo, clubes y agrupaciones de pesca de toda la provincia, comerciantes y operadores turísticos que brindan servicios vinculados a la actividad. Su misión es colaborar con el cuidado de las especies y buscar soluciones a los problemas que se podían presentar y que podrían afectar al deporte o al Estado.

“Nunca nos llamaron para preguntarnos nuestra opinión. Se tomó la medida sin más. Nuestra palabra no es determinante, pero la idea era que participemos teniendo en cuenta que somos nosotros los que recorremos los sitios pesqueros de toda la provincia y realmente sabemos lo que está pasando”, explicó Lobo. Anunció que en las próximas horas se reunirá la Mesa y que están dispuestos a solicitar una reunión con Jaldo para plantearle el problema.

Las reacciones por la veda no se hicieron esperar. “Nos mataron con esta resolución. La temporada no fue del todo buena y, al no poder pescar en los ríos, teníamos buena afluencia de deportistas a La Angostura. Ahora nos obligan a parar por más de 40 días. Nos condenan al quebranto”, aseguró Miguel Quesada. “Las autoridades tienen que entender que de la pesca vive el almacenero, el carnicero, el verdulero, el que vende gaseosas y cigarrillos y hasta los que filetean los pejerreyes”, agregó Gastón Mamaní, vecino de El Mollar.

La medida dictada por las autoridades también terminó complicando a los clubes de pesca. No sólo afectó el inicio de sus competencias anuales -normalmente los campeonatos anuales comienzan en marzo-, sino también porque no pueden recibir visitantes en sus sedes que aportan los dineros para subsistir. “Enero y febrero son meses que no vemos una moneda porque la gente no va. Y llevarlo a marzo, es una muerte, porque serán tres meses en los que no tendremos ingresos”, analizó un directivo.

El sector comercial también observa con preocupación lo que está sucediendo. “Venimos de una temporada bastante irregular. No se puede pescar aquí y, desde hace unos días, parcialmente en Santiago del Estero. Estamos trabajando a quebranto porque tenemos paralizados los artículos que adquirimos para vender en esta época del año. Veníamos trabajando con los equipos para pejerreyes, pero ahora tampoco podremos venderlos”, subrayó Fernando Saba.

El dictado de esta medida también afectará al debido control del cumplimiento de la veda. En los últimos días, la Dirección de Delitos Rurales realizó varios allanamientos donde secuestró redes, trasmallos y equipos de pesca a las personas que pescaban en los ríos. Ahora deberán sumar los recorridos en los lagos, lo que humanamente será imposible.

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