11 Diciembre 2014
ARCHIVO LA GACETA
El reloj avanza hacia el día más esperado por los choferes de ómnibus interurbanos de la provincia. Mañana debería implementarse definitivamente el uso de la Tarjeta Metropolitana para el pago del boleto, pero la incertidumbre continúa reinando por la falta de definiciones de las autoridades provinciales y de la empresa que gestionará el sistema, Metropolitana SA.
El gremio de los conductores, la Unión Tranviarios Automotor (UTA), se mantiene alerta a lo que ocurra mañana y, de no cumplirse el compromiso de comenzar mañana, podrían analizar medidas de fuerza para la semana que viene.
"En principio todo tiene que estar listo para mañana, pero después de la reunión que mantuvimos el viernes pasado en Casa de Gobierno no hemos vuelto a tener noticias", dijo hoy César González, secretario General de UTA, en diálogo con LA GACETA. "Creo que las condiciones están dadas: los plásticos están en las bocas de expendio, los equipos lectores están en los ómnibus y sólo faltaba el decreto que debía firmar el Gobernador", agregó el dirigente.
González informó que, si mañana no se materializa el cambio en el sistema de pago, los dirigentes se reunirán para analizar medidas de fuerza para la semana que viene. "Los trabajadores están apurados con este tema. Todos los días soportamos hechos de violencia arriba de los colectivos, y la inseguridad es tanto para los choferes que manejan plata como para los pasajeros que usan el servicio. Ya no es por la multiplicidad de tareas (conducir y cobrar el boleto), sino una cuestión de seguridad", enfatizó.
La semana pasada UTA había anunciado un paro para el viernes 5, pero luego fue desactivado tras la reunión en Casa de Gobierno. En esa oportunidad, las autoridades se comprometieron a poner en marcha el nuevo sistema durante esta semana.
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