“Los partidos han perdido vigencia”, lamenta Alfredo Guido Linares. El referente de FR recuerda que en los tiempos en los que a él le tocó ser un protagonista de la política, las fuerzas políticas tenían ideas rectoras. “Recuerdo que a fines de los 40, cuando me recibí de bachiller e inicie mi vida política, los partidos tenían una verdadera personería institucional. Había convocatoria patriótica y grandes talentos doctrinales, como Moisés Lebensohn en la UCR y Joaquín Díaz de Vivar en el PJ”, evocó.
“Durante los 60 y hasta los 70, incluso, los partidos tenían una personalidad partidaria en vigencia. Todo eso comenzó a desmoronarse en los 90. La despersonalización, se evidenció en la falta de presencia de las fuerzas políticas durante esa década. Se produjo un quiebre: empiezan a primar las hermenéuticas personales por sobre los valores humanos”, manifestó.
Según Linares, el ex presidente Carlos Menem da testimonio de ello: “puso en práctica un pensamiento propio, que se aparta de la ortodoxia peronista”, sentenció.
“Esto significó, también, una pérdida de las jerarquías universales, que ponían primero a la república y a la democracia. El resultado afecta a la instituciones”, afirmó.