Exitoso programa de eliminación del Bromuro de Metilo

Exitoso programa de eliminación del Bromuro de Metilo

El "bromuro de metilo" es uno de los productos químicos que más daño causa a la capa de ozono. Se trata de un fumigante que es utilizado por los productores de tabaco, frutilla, flores de corte y hortalizas para controlar hongos, insectos, malezas y nemátodos que atacan a esas producciones. Por ello, el INTA Prozono está desarrollando un programa con el objetivo de disminuir esos daños y proponer que los agricultores abandonen su utilización.

GENTILEZA: CLAUDIO ALONSO HERRERA (PSA) GENTILEZA: CLAUDIO ALONSO HERRERA (PSA)
07 Noviembre 2008

Entre los principales destructores de la capa de ozono se encuentra el "bromuro de metilo". Se trata de un fumigante que fue utilizado comercialmente por más de 40 años para el control de hongos, insectos, malezas y nemátodes.
En 1992, en el Protocolo de Montreal, Argentina acordó su eliminación antes de 2015. En 2000, el tabaco era el sector de más alto consumo de este fumigante en la Argentina, con 268 ton anuales.
En diálogo con LA GACETA Rural, el ingeniero Alejandro Valeiro, que coordina el proyecto nacional INTA-Prozono, desde la EEA Famaillá, explicó desde cuándo trabaja el organismo en el reemplazo del bromuro en tabaco.
"El INTA comenzó esta tarea en el sector tabacalero argentino en 1998, en el marco del Proyecto INTA Prozono. Este proyecto es coordinado con la Oficina del Programa Ozono (Ministerio de Relaciones Exteriores, Secretaría de Medio Ambiente y Desarrollo Sustentable y Secretaría de Industria) y el Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD)", comentó.
El equipo del Proyecto, en una primera etapa (1998-2000), comparó diferentes técnicas de almácigo, definiendo las dos alternativas más promisorias: la de los "almácigos flotantes" y la del uso de "metam sodio". A partir de 2002, se obtuvo financiamiento del Protocolo de Montreal, que permitió transferir estas alternativas.
- ¿Cómo hizo el INTA para llegar a los más de 20.000 productores tabacaleros del país?
- Es que estos logros no son sólo del INTA, sino de todo el sector tabacalero. Desde el comienzo, para promover el reemplazo del bromuro, se formaron Comisiones Asesoras con participantes de toda la cadena tabacalera (cooperativas de productores, cámaras tabacaleras; empresas acopiadoras; asociaciones, etc.) y -sobre todo- con los gobiernos de las siete provincias productoras: Misiones, Jujuy, Salta, Tucumán, Catamarca, Chaco y Corrientes. En Tucumán, por ejemplo, el éxito que se obtuvo no hubiera sido posible sin la activa participación de la Dirección de Agricultura de la Subsecretaría de Asuntos Agrarios y Alimentos, que fue pionera en la difusión de los almácigos flotantes, dejando de financiar bromuro de metilo a los productores y, más tarde, prohibiendo su uso para tabaco.
Los gremios (Asociación, Unión y Cámara) que agrupan a los tabacaleros en Tucumán colaboraron, y las empresas acopiadoras se sumaron al trabajo. Este esfuerzo del sector tabacalero puede ser un ejemplo para solucionar problemas tecnológicos de otras cadenas.

- ¿Cómo se realizó la transferencia de las tecnologías?
- El Proyecto INTA Prozono se organizó en tres componentes simultáneos: 1) Adquisición y distribución de equipamiento e insumos: con criterios establecidos por las Comisiones Asesoras; el Proyecto compró equipamiento e insumos necesarios para impulsar el uso de alternativas (por valor de U$S 2,1 millones) y los entregó a los productores en cada región; 2) Transferencia de tecnología y capacitación: se conformó un equipo técnico y se implementó un intensivo programa de transferencia. Unos 7.300 productores tabacaleros y unos 330 técnicos recibieron capacitación en cursos, jornadas, días de campo, etc., para implementar las alternativas. Se conformaron dos Centros de Experimentación (Misiones y Salta) y un Centro Demostrativo (Cooperativa de La Invernada/AER La Cocha, Tucumán); 3) Paquete de Políticas: el proyecto sugirió, colaboró y contribuyó en el diseño de medidas regulatorias de la oferta de bromuro de metilo, que permitieran acercarse al objetivo final de su eliminación en el sector tabacalero.

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- ¿Qué resultados se obtuvieron hasta ahora?
- El consumo de bromuro de metilo disminuyó un 94%: de 268 ton métricas, en 2000, se pasó a 13,4 ton, en 2007. El uso del fumigante por almácigo para una hectárea cayó de 3,6 kg, en 2000, a 0,17 kg, en 2007. Más de 20.000 tabacaleros (93,7% del total) dejaron de utilizar bromuro y adoptaron las alternativas propuestas. Se generaron nuevas tecnologías que permitieron reducir los costos de las alternativas: un sustrato a base de corteza de pino, el diseño de bandejas de plástico flotantes, nuevos diseños de piletas con llenado automatizado, entre otras. Cuatro provincias prohibieron el uso en tabaco (Corrientes y Tucumán) y para todos los usos (Salta y Misiones) a partir de 2007.

- ¿Cómo sigue el Proyecto?
- Continúa con acciones que aseguren la sustentabilidad del reemplazo del bromuro en el mediano plazo. Entre ellas merece destacarse el trabajo con las escuelas primarias de las áreas tabacaleras, donde un grupo de titiriteros representa una obra. Más de 23.000 chicos de las escuelas rurales del sur de Tucumán y de las áreas tabacaleras de Salta y Jujuy participaron y recibieron el libro, además de haber completado actividades vinculadas con el medio ambiente y la capa de ozono. En Tucumán también se está trabajando en capacitación de productores en programas de Manejo Integrado de Plagas y Enfermedades en tabaco, con la idea de reducir la aplicación de agroquímicos en el cultivo.

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