Paisajes majestuosos y aventura extrema sin salir de la provincia

Se dará cuenta de que ha llegado porque una alfombra verde se deslizará, silenciosa, entre sus pies. Porque, raudo, el cielo se divorciará de las nubes y un sol de brazos largos se desperezará brillante ante sus ojos. Porque las montañas lo abrazarán desde todos los puntos cardinales y exhalarán un aire cargado de buena energía. Porque, orgullo tucumano por excelencia, Tafí del Valle es así: inconfundible.
La villa turística que ha dado fama internacional a la provincia se está preparando para recibir, en esta temporada, muchos más visitantes que el año pasado, confió el director de Turismo de esa localidad, Horacio César Carreras. La magnificencia de sus paisajes y su proximidad la ubican como una de las opciones más recomendables para aquellos que gusten más del cerro que de las playas y que ansíen disfrutar de sus vacaciones sin andar largas distancias.
A ellos, Carreras anticipó que los precios no variarán respecto de la última temporada. “Los hoteles costarán, por persona y por noche, desde $ 65 en adelante; los hospedajes, variarán entre $ 30 y $ 35; los hostels, entre $ 25 y $ 30; y los campings son los más económicos: ofrecen cabañas de $ 40 la noche para cuatro personas o lugares para quienes van en carpa, que deberán pagar $ 5 cada uno”, detalló.
El funcionario ponderó las múltiples actividades que es posible hacer en el valle de Tafí. “Los turistas pueden contratar varias excursiones: cabalgatas, expediciones en 4x4, parapente, visitar los museos, o hacer un safari fotográfico en la Vuelta al Valle, un viaje en el que se llega hasta El Mollar, pero sin ir por la ruta”, ejemplificó.
Carreras recordó además que, todos los fines de semana, habrá un espectáculo distinto en la plaza principal, con música folclórica y del recuerdo, y artistas locales.

Sol y buen vino
A 80 kilómetros de Tafí, se encuentra Santa María de Catamarca, un paraje que exuda huellas de su pasado calchaquí. Para muestra, basta con relatar que es uno de los más importantes centros arqueológicos del Noroeste argentino, con vestigios de 27 instalaciones indígenas. Por eso, sus principales atracciones son los museos, el sitio arqueológico de Cerro Pintado y el pueblo histórico de Fuerte Quemado.
Siguiendo con el circuito calchaquí, el viajero llegará a Cafayate, cuna del sol y del buen vino. Consciente de sus atractivos, esta localidad salteña también se está preparando para exponerse ante los visitantes, reconoció su secretario de Gobierno, Sebastián Casimiro.
“La temporada turística comenzará después del 20 de diciembre, con peñas culturales que irán preparando el ambiente antes de la famosa Serenata, que este año tendrá lugar el 27 y 28 de febrero y el 1 de marzo”, manifestó.
El funcionario reconoció que lo que más llama la atención de los turistas son las bodegas -hay seis grandes, de las cuáles cinco se pueden visitar-, pero que también se puede conocer la cascada del Río Colorado, andar en cuatriciclo por los médanos, visitar las ruinas del Divisadero y los museos Arqueológicos y de la Vid y el Vino. Todo esto, imbuidos en un microclima privilegiado, que garantiza un contexto primaveral eterno.
Desde Tucumán se llega por la ruta 307, se empalma con la  357 y, por último, se toma la ruta 40, en un recorrido total de 234 km.