Con canciones populares y con aires de romanticismo, Los Tucu Tucu se ganaron un lugar de privilegio en varios festivales, en especial en los de Cosquín y Jesús María, los más populares del país.
Con la identidad definida, Los Tucu Tucu no cambiaron mucho a lo largo de su historia, y esa decisión, criticada por algunos colegas, los llevó a ser amados por un público incondicional que tuvo garantizado con la presencia de ellos sobre el escenario un show compacto y atractivo.
La banda creada en 1960 por uno de los fallecidos ayer, Ricardo Romero, impuso en los años 60 el folclore como fenómeno radial, la naciente televisión y la venta de discos. Eso se dio gracias a la creación de temas que se convirtieron en clásicos casi de inmediato, como "Tristeza de un porqué", "Zafrero", "Sin adiós" y "La Cautiva". También figuran entre sus hitos "Candombe para José" y "Vidala del tucu tucu". Las composiciones abarcaron siempre un espectro muy amplio, pero la idiosincrasia y la vida del hombre del interior del país siempre estuvo presente, y para los tucumanos no resulta difícil encontrar imágenes conocidas en cada canción. Pero la amplitud temática y la forma de relatar sucesos y de mostrar paisajes eran lo suficientemente abiertas como para poder acceder al público de cualquier punto del planeta.
Los Tucu Tucu nacieron en un momento clave, cuando el furor incluía a grupos como Los Fronterizos, Los 4 de Córdoba, Los de Salta, entre otros. Pero logró mantenerse unido y vigente.