
Donald Trump, en la Casa Blanca. FOTO TOMADA DE BLOOMBERG.COM

El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, firmó este jueves un decreto que modifica la clasificación del cannabis dentro de la Lista de Sustancias Controladas. A partir de esta decisión, la marihuana dejará de integrar el grupo de las sustancias consideradas más peligrosas, donde se encuentran drogas como el LSD o la cocaína.
Sin embargo, el cambio normativo no implica una legalización del consumo adulto, sino que habilita la investigación científica con fines medicinales a nivel federal, una práctica que hasta ahora permanecía en la ilegalidad y solo estaba permitida bajo legislaciones estatales.
La reclasificación fue anunciada por el propio Trump en el Salón Oval de la Casa Blanca, en un acto del que participaron usuarios medicinales del cannabis, un militar retirado uniformado, médicos y emprendedores vinculados a la industria de la planta.
Durante el anuncio, el mandatario aseguró que se trataba de una medida largamente reclamada por pacientes que padecen enfermedades crónicas. Según expresó, “mucha gente que lleva décadas sufriendo un gran dolor” le había pedido que avanzara con esta iniciativa, la cual había sido prometida durante la anterior gestión de Joe Biden, pero que nunca llegó a concretarse.
Trump sostuvo que la reclasificación del cannabis beneficiará a personas con “dolencias incurables, cánceres agresivos, convulsiones, trastornos neurológicos y otro tipo de enfermedades”, así como también a “veteranos con lesiones relacionadas con sus servicios al país y personas mayores que viven con problemas médicos crónicos que han deteriorado gravemente su calidad de vida”.
El decreto no establece una legalización ni una despenalización del uso de los derivados de la planta. El traspaso del cannabis de la Lista I, que agrupa a las sustancias consideradas más peligrosas, a la Lista III de Sustancias Controladas implica que, a partir de ahora, el gobierno de los Estados Unidos permitirá la realización de estudios científicos sobre los usos medicinales de la marihuana, que hasta el momento eran considerados ilegales a nivel federal.









