06 Diciembre 2019
PROTAGONISTA. El artista posa junto a una de sus esculturas totémicas con iconografía precolombina.
Por estos días Miami se ha convertido en un refugio de arte y de artistas.
Coleccionistas, curadores y espectadores participan desde hace un par de días de eventos en los que se mueve mucho dinero.
En Art Basel Miami Beach funcionan 250 galerías con más de 4000 expositores. En paralelo, decenas de actividades se llevan a cabo en diferentes puntos de la ciudad en el marco de la Miami Art Week, en donde se da la mayor concentración anual de protagonistas del mundo del arte.
“Uno de los grandes protagonistas de esta edición del festival es Gabriel Chaile, el tucumano que sorprendió este año al convidar mate cocido en su stand de Art Basel, en Basilea, el corazón del mercado del arte mundial. Allí vendió de inmediato todas las ollas populares intervenidas, procedentes de comedores de distintas provincias. Anoche ofreció a cientos de personas en el hotel Faena pan calentado en el horno que construyó para la ocasión, similar a los que ya había creado para la Art Basel Cities Week y para su muestra en el Museo de Arte Moderno de Buenos Aires”, relata el diario La Nación.
El horno fue adquirido por el mismo Alan Faena, quien decidió que se quede en Miami, en su inmenso espacio artístico.
En la noche del martes, en la segunda edición del Faena Festival se abrió “The Last Supper” (“La última cena”), el megaevento curado por Zoe Lukov. “Con diferentes formas y preparados con diversas harinas, los panes llegan en bandejas que circulan sin parar y acaban de salir de un gran horno de adobe que es, en realidad, una obra de arte contemporánea”, cuenta Infobae. El horno que cocinó los panes de esta fiesta que se llevó adelante a orillas del mar es una de las seis obras realizadas en estructuras de aluminio, adobe, ladrillos refractarios y bronce por el artista argentino Gabriel Chaile.
El tucumano realizó seis esculturas totémicas precolombinas, y le dijo a ese medio: “me gusta pensar mi obra en relación con el horno de Víctor Grippo (en 1972 participó en Buenos Aires en la muestra “Arte e Ideología, CAYC” al aire libre, donde presentó la obra Construcción de un horno popular para hacer pan)”.
“Los extranjeros me preguntan si soy peruano, por el peso de la imagen y entonces yo les cuento sobre las culturas a las que hago referencia en mi obra, que son culturas chiquitas que existieron y que aún hay muchas comunidades que son parte de esas culturas indígenas del noroeste argentino”, agregó el artista.
Otro argentino, informa la agencia Télam, Jorge Pérez, inauguró el Espacio 23, que reúne más de 100 obras de 85 artistas de todo el mundo, como León Ferrari, Michelangelo Pistoletto, Doris Salcedo, Ai Weiwei, Teresa Burga, Eugenio Dittborn, Alfredo Jaar y Marie Orensanz.
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