09 Octubre 2019
LA IMAGEN MÁS DURA. La parálisis generada por el paro de colectivos. LA GACETA/FOTO DE DIEGO ARÁOZ
“Si no hay una respuesta hoy, a partir de la cero hora no salimos a trabajar”. Con estas palabras el dirigente Jorge Kiener (UTA nacional) advirtió a los empresarios del transporte público de pasajeros que los empleados no aceptan el despido de 150 choferes en Tucumán.
El conflicto por los despedidos en el transporte público de Tucumán cobró trascendencia nacional. Dirigentes de la Unión Tranviarios Automotor (UTA) desembarcaron en la provincia para apuntalar la reincorpración de los 150 despedidos. "No se van a quedar sin trabajo", había dicho Kiener, antes de entrar a la reunión.
Los chóferes despedidos, junto con César González secretario general de la UTA en Tucumán y Kiener, marcharon esta mañana hasta la Secretaria de Trabajo para mantener una audiencia con los empresarios.
Por su parte, el empresario Jorge Berreta (Aetat) lamentó que la cúpula sindical de UTA no aceptó la propuesta de un cuarto intermedio que les había propuesto. "Hemos planteado que la ecuación económica no cierra; que las políticas del Gobierno nacional perjudicaron a los usuarios con semejante devaluación, donde los insumos son en dólares y nuestra recaudación es en pesos -dijo Berreta-; que no somos privados, que si bien explotamos el servicio privado, estamos regulados en nuestros ingresos y que la situación es crítica, que hubo reducción de servicios y por ende tuvimos que hacer una reducción de personal para garantizar el servicio básico de transporte", agregó.
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