El desafío es proteger el suelo en invierno

El desafío es proteger el suelo en invierno

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Los productores de granos de la región están esperando que los trigos empiecen a madurar y entregarse para empezar a corto plazo la trilla de los mismos, que en esta campaña, en general, se observa que están muy bien desarrollados, salvo aquellos que llegaron a sufrir problemas de falta de humedad y algunos inconvenientes por ataques de plagas y enfermedades.

Seguramente, este año los productores tuvieron que tener en cuenta muchos aspectos a la hora de decidir sobre la siembra de cultivos invernales, considerando, como primera medida, que los suelos que venían de soja o poroto hayan sido liberados a tiempo, aprovechando el contenido de humedad que en ese momento tenían los lotes.

Los productores saben perfectamente bien que una vez liberados los suelos de los cultivos de verano, si las condiciones climáticas y de humedad del suelo son las adecuadas, y si tienen necesidad de mantener limpios y bien conservados los campos y si existen perspectivas de concretar buenos negocios con los cultivos invernales, seguramente se decidirán por realizar la siembra cuando lo que crean lo mejor y conveniente para sus campos, y sus bolsillos.

Como dijimos, los productores esperan que la trilla de los granos finos pueda llegar a ser buena, cuando ya quedan pocos días para que los cultivos se entreguen y, a la vez están en alguna medida ya planificando labores futuras para la próxima gruesa.

Lo cierto es que el sector, en esta campaña invernal, aprovechó el “viento de cola” que se viene dando en la producción de trigo nacional, que aumentó de una manera destacada desde hace varias campañas.

Lo que seguramente se espera es que, después de los resultados de las elecciones de octubre, no ocurra lo que ya pasó en gobiernos anteriores, donde hubo caídas importantes del área implantada con trigo y otros cultivos, como consecuencia de las bajas expectativas y de la nula rentabilidad que tenían los productores, debido principalmente a una política agropecuaria desacertada.

Cultivos de servicio (CS)

Si es bueno decir, que en el NOA, debido a que las condiciones climáticas para el cultivo de granos rozan lo marginal, comparado con la Pampa Húmeda, se siembran generalmente los cultivos invernales mirando el futuro de la próxima gruesa, y también tomando en cuenta, actualmente, la gran importancia que adquiere el cultivo de servicio (CS).

Este es un concepto novedoso para nuestra región, que fue ampliamente cubierto en el reciente Día de Campo de Trigo que realizó la Estación Experimental Agroindustrial Obispo Colombres (Eeaoc) de Tucumán, en la subestación Monte Redondo -donde en la edición de hoy de este Suplemento presentamos los informes técnicos y conclusiones allí presentadas-, ya que son cultivos que no se cosechan, sino que se siembran con el objetivo de brindar algún servicio.

Los productores en la provincia buscan siempre sembrar en el invierno trigo o garbanzo, buscando una alternativa más que pueda ayudar a sus finanzas. Pero también buscan, muchas veces, que sus suelos estén protegidos durante el invierno frente a las inclemencias climáticas que se dan en esos meses, pero como ya afirman los técnicos, los cultivos de servicios que son evaluados por ellos, empiezan a afianzarse en la región por los beneficios que generan en los suelos durante el invierno.

Avances en investigación

Los técnicos que trabajan en la Eeaoc que disertaron la semana pasada en los predios que tiene esta institución en Cruz Alta, afirmaron que lograron muy buenos avances sobre ensayos e investigaciones en los “cultivos de servicios”, en un contexto de cambio de paradigma en el sistema productivo, que apunta a tratar de reducir la carga del uso de agroquímicos en el suelo y el ambiente, siguiendo los preceptos de conservar el medio ambiente.

Además, con las diferentes especies que se siembran destinadas a los “cultivos de servicios”, tanto en gramíneas como en leguminosas, tiene como otro objetivo importante la idea de generar cobertura en el suelo y brindar mayor cantidad de materia orgánica en un futuro.

Protección al suelo

Otro aspecto que se considera transcendental es que, al tener cubierto un suelo que viene después de un cultivo de verano y que generalmente tiene humedad y un gran banco de semillas, es lograr un control adecuado de las malezas, además de la provisión de nutrientes (al suelo) o la regulación de las napas (en el subsuelo).

Todo esto muestra que el productor va entendiendo que está produciendo en ecosistemas con sus reglas y propiedades que deben ser respetadas, por lo que debe usar la ecología a su favor, para entender su comportamiento y producir más desde una mirada ecológica y ambiental.

Es muy importante que los productores no se olviden nunca de la complejidad del ambiente en el que trabajan, y cuyas acciones tienen impactos reales sobre la calidad de vida de los ambientes. Esto, inevitablemente, genera caídas a veces muy grandes en los rindes e impactos ambientales nocivos, que lo perjudican ahora y lo que es peor para el futuro de las próximas campañas.

Por ello es que resulta necesario que los productores trabajen bajo técnicas de producción aconsejadas por las instituciones técnicas como la Eeaoc y de otras que trabajan en la región, y que tanto conocen sobre estos temas, a través de las investigaciones que desarrollan desde hace tiempo.

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