31 Julio 2019
María Fernanda Bähler admitió ayer que siempre quiso ser camarista penal, y que, por eso, decidió concursar y terminar su trayectoria como fiscala correccional N°2 de esta capital (el cargo quedó vacante y ha de ser completado en propiedad mediante el respectivo concurso público ante el Consejo Asesor de la Magistratura). “Estuve tantos años del lado de la acusación que necesitaba un cambio. Me interesa impartir justicia y aportar toda la experiencia adquirida como fiscala correccional”, explicó. Y añadió: “voy a trabajar de sol a sol para merecer este cargo”.
Bähler relató que hacía 24 años que prestaba servicios en los Tribunales. “Siempre trabajé con total independencia y pienso seguir haciéndolo. Es la posición que corresponde al Poder Judicial. Voy a aplicar la crítica racional y los conocimientos jurídicos para tratar dar la respuesta que la sociedad espera”, prometió.
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