Por Rodolfo Casen
14 Junio 2019
MUESTRAS DEL DETERIORO. El cartel informativo ya no se puede leer. LA GACETA / FOTO DE OSVALDO RIPOLL.-
“Desde hace dos años venimos trabajando para lograr la custodia de ese espacio tan lleno de historia y que debe ser valorizado como sitio arqueológico. Ya se consiguió el primer objetivo. Ahora hay que avanzar en los aspectos técnicos y de investigación que apuntarán a poner la estructura a la vista”, afirmó la arquitecta Mercedes Aguirre, titular de la Dirección de Patrimonio Cultural de la provincia.
“Hay que tener en cuenta que Ibatín es el segundo legado histórico más importante que tiene la provincia, después de la Casa Histórica. Hay que integrarlo al circuito turístico cultural de la provincia. Las metas son a largo plazo”, añadió la funcionaria.
Aguirre advierte que Ibatín tiene que formar parte del actual circuito que nace en la casa donde se declaró la Independencia del país, pasa por las Ruinas de Lules y se extiende a los Valles con los museos de Tafí, Amaicha y las Ruinas de Quilmes. “Todos estos lugares hacen a la identidad de nuestra provincia y la gente que nos visita siempre se muestra ávida de acceder a ellos. Frente a este movimiento hay que exhibirlo en las mejores condiciones”, observó.
El abandono
Desde la ruta 38 hasta Ibatín hay ocho kilómetros de camino de tierra. En estos días el trayecto está en buenas condiciones. Los lugareños dicen que es una excepción en razón de que esta vía fue reparada hace pocos días debido a que se celebró un nuevo aniversario de la primera fundación.
Ahí se realizaron festejos de recordación, como todos los años, de los que participaron autoridades locales y provinciales y vecinos. “Ahora se puede circular, pero muchas veces, principalmente cuando llueve, la zona queda aislada. Es decir que el acceso debe ser enripiado o pavimentado. Además, hacen falta señalizaciones”, advirtió Celeste Álvarez, vecina del lugar.
Al llegar al sitio histórico se advierte que el Centro de Información Turística y Cultural que se inauguró en 2012, ahora está semi destruido. “Hace dos años un fuerte vendaval lo dañó bastante. Se lo reparó y después otro temporal lo volvió arruinar. Está sin funcionar desde 2017, cuando a mí y a otra compañera nos dejaron sin trabajo”, contó Cristian Guaraz.
Guaraz y Celeste trabajaron cinco años como informantes turísticos. Ahora Cultura los reincorporaría a esa tarea. Sin tener aún la designación, ambos ex empleados vienen realizando voluntariamente trabajos de limpieza y de recepción de los visitantes.
“Esperamos que se revalorice este sitio. Lamentablemente se lo mantuvo olvidado totalmente en los dos últimos años. Nosotros regresamos a fin de evitar que el Centro de Información termine de ser desmantelado por los vándalos. Además queremos volver a tener nuestro trabajo”, dijo Cristian.
En lo inmediato el inmueble reclama cestos para los residuos y la reinstalación de carteles con referencias históricas. Los que estaban resultaron dañados por las inclemencias climáticas.
Los custodios ad honorem se dedican también a hacer tomar conciencia a los vecinos sobre la necesidad de proteger el lugar. “Una vez que tome impulso Ibatín, las visitas van a ser incesantes y contribuirán a favorecer el comercio de distintos productos de la zona. De ahí que le pedimos a la gente que cuide aquí, que sienta que el sitio es suyo”, concluyó Celeste.
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