12 Diciembre 2018
HÉCTOR PERALTA / LA GACETA
Seis cuadrillas de contratistas y subcontratistas de la Empresa de Distribución de Electricidad de Tucumán (EDET) trabajaron ayer para normalizar el servicio en el corazón del microcentro de esta ciudad.
Un transformador, dañado durante las tormentas del mes pasado, fue cambiado completamente. La situación generó las quejas de los comerciantes afectados de la zona, que observaban el trabajo de los operarios y comentaban que la peatonal había sido construida recientemente.
“No habíamos tenido ese inconvenientes antes”, recordaron los empresarios en la zona de la peatonal Mendoza. Los encargados de la obra estimaron que los trabajos podrían extenderse durante cuatro horas, y que el cambio total obedece a que el equipo estaba quemado.
La tarea del personal de la distribuidora se intensificó en un día de elevadas temperaturas y de cortes en el suministro eléctrico en distintas zonas de la provincia.
Según los voceros de la compañía, esta afectación tuvo su origen en un problema en la línea de distribución y no precisamente en la alta demanda de los usuarios, por efecto del encendido de los aparatos de aire acondicionado.
En EDET explicaron ayer a LA GACETA que el inconveniente se originó en una línea de transporte de energía de Trasnoa, que cubre desde El Bracho hasta los Ralos y llega a Burruyacu. Esta es la misma línea que abastece, por ejemplo, a los clientes de Yerba Buena. Desde la distribuidora indicaron que, paulatinamente, se fue restableciendo el servicio en las zonas afectadas.
A raíz de esa situación, también hubo cortes en el servicio del agua potable, ya que hay barrios que se abastecen con bombas eléctricas que no pudieron reabastecerse por la interrupción de la energía.
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