11 Abril 2012
Emociones: no se interpretan
Del 10 al 20 % de los pacientes sufre alteraciones cognitivas. La memoria, la atención, y la capacidad de organización se afectan de manera sutil aún en estadios iniciales. Se estima que cerca del 56% sufre apatía, falta de expresión facial, desgano, situaciones que confunden a sus familiares y que les impide efectuar una correcta interpretación de las emociones, lo que genera más preocupación y ansiedad en el entorno del paciente. Estos síntomas no se interpretan como parte de la enfermedad y muchas veces no son diagnosticados de manera temprana y por lo tanto no reciben tratamiento oportuno.
Terapia: apoyo a la familia
Además de los avances en las investigaciones sobre el tratamiento del Parkinson, el aporte de disciplinas como rehabilitación cognitiva, terapia ocupacional, kinesiología, danzaterapia, fonoaudiología, psicoterapia y musicoterapia son cruciales para sobrellevar las dificultades de los pacientes y de su entorno. "El apoyo psicoterapéutico del paciente y sus familiares es esencial para reducir el impacto del mal en la vida diaria. El Parkinson afecta no sólo al paciente sino a los que conviven y cuidan al enfermo", comenta la doctora Anabel Chade.
Prevención: hay que facilitar el acceso a las drogas
"Urge identificar los síntomas preclínicos y estadios premotores para prevenir la progresión del mal, sin esperar que se desarrolle la enfermedad para empezar a tratar la descompensación de los síntomas motores". El acceso a los fármacos y a la rehabilitación muchas veces no está facilitado para todos y esto afecta la calidad de vida ocasionando discapacidad", advierte el doctor Oscar Gershanik.
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