24 Mayo 2009 Seguir en 
Dicen que Alec Baldwin, que fue pareja de Kim Bassinger, es un hombre de pocas pulgas. Al llamar ante la prensa a su pequeña hija “cerdita insolente”, atrajo todas las miradas y los rumores sobre su mal carácter cobraron más fuerza. Cuando la reina Isabel II decidió darle el título de lord a Elton John, seguramente no tuvo en cuenta el lenguaje de grueso calibre que el músico usa normalmente para referirse a propios y extraños. Un comportamiento lejano de lo que se espera de un caballero inglés.
Más broncas que sonrisas
Culpable o no de la ruptura de Los Beatles, Yoko Ono despierta menos sonrisas que un martillazo en un dedo. Sin embargo, ella se esfuerza por hacer gala de su simpatía en diferentes acontecimientos y programas de televisión.
Afirman que si se quiere escuchar una antología de vulgaridades españolas, hay que preguntarle a Javier Bardem sobre su vida amorosa y si tiene una relación con Penélope Cruz. Luis Miguel es el preferido de las latinas, que deliran con su voz. Sin embargo, por su mala onda sus problemas con la prensa crecen tanto como su éxito.
¿A cuántos no le dieron ganas de destrozar el teléfono contra el piso? Pero, ¿lo hicieron? Y sobre todo, ¿cuántos lo llevaron hasta el lobby de su hotel y se lo arrojaron al recepcionista en la cabeza? Pues bien, esta historia forma parte del background del actor de “Gladiador”, Russell Crowe, quien parece tener poca paciencia con las telecomunicaciones.
Un gruñón
Sean Penn es uno de los chinchudos más famosos de Hollywood. Su tierno personaje en “Yo soy Sam” despertó aplausos por doquier y así logró alejarse de la imagen de gruñón.
¿Alguien la vio sonreír alguna vez después de dejar de ser una “Spice Girl”? Victoria Beckham tiene fama de renegona. Sus amigas señalan que ella es afortunada porque David, su marido futbolista todavía la aguanta.
En repetidas ocasiones, Gerard Depardieu puso en su lugar a periodistas y fotógrafos, en imágenes que contrastan con el bonachón Obelix o el tierno Bogus, dos de sus máximas interpretaciones.
Opacó su voz
La “mala onda” de la cantante islandesa Björk opacó muchas veces su impresionante voz. Durante el rodaje de una película estuvo a punto de irse a las manos con el director Lars Von Trier.
Temible
Muchos paparazzi consideran a Colin Farrell como uno de los terrores de su profesión y otros ni se atreven a acercársele. El furioso actor irlandés no duda en dar rienda suelta a su carácter cuando la ocasión lo amerita.
Made in Argentina
Siempre tiene una sonrisa a flor de piel en la pantalla chica y en lugares públicos. Pero la diva de los almuerzos Mirtha Legrand es otra cuando está fuera de las cámaras. Es recordada su reprimenda -con malas palabras incluidas- contra sus colaboradores en el programa.
Otro de los “célebres” artistas argentinos malhumorados es Charly García. El creador de “Yendo de la cama al living” varias veces fue llevado desde el escenario a un hospital o a una comisaría, luego de romper guitarras o de agredir a fotógrafos. Hoy está en franca recuperación.
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