Uno más uno no siempre es dos, pero la pareja engañada no tiene por qué saberlo, según aconsejan ciertos “expertos en infidelidad”. Echarle el ojo al compañero de trabajo o a la secretaria del mejor amigo nunca ha sido difícil, pero los planes pueden complicarse, advierten. Para aquellos que todavía no entienden el “arte del buen engañar”, el blog “Atención Viandante” compiló en tono de sorna las mejores coartadas para infieles y la manera más correctas de utilizarlas:
- Nunca incluya a más de tres actores en sus pretextos para salir con su amante: esto amplía la cantidad de personas que pueden meter la pata y disminuye su margen de maniobra.
- Use excusas aburridas sólo una de cada tres veces. Es estadísticamente imposible tener un velorio todos los sábados a la noche.
- Organice actividades fijas legales y aceptables. Juegue al fútbol los domingos, cene con sus compañeros los jueves o salga todos los fines de semana largos a pescar. Seguramente sus amigos le permitirán escapar de estas citas más fácilmente que su pareja.
- Cubra sus rastros, memorice sus mentiras y entrénese en las coartadas que planificó. Siempre cambie un detalle mínimo al contar la historia por segunda vez. Esto le dará credibilidad, aunque el detalle modificado debe ser insignificante. Si se equivoca en algo muy grueso lo pescarán; si no deja cabo sueltos despertará sospechas de por qué recuerda tanto y tan bien. Pensará que usted ha entrenado el “versito”.
- Ante la acusación inevitable tiene dos opciones. 1) Decir la verdad descaradamente, usando un tono de broma: “Sí, no sabés amor, me senté en las piernas del jefe y la pasamos re bien”; 2) Decir la verdad descaradamente, usando un tono de irritación: “Sí ¿Sabés qué? Nos perdimos en el boliche y nos besamos toda la noche. No sé cómo hiciste para entrar por la puerta y no golpear con los cuernos”. Acto seguido, dé un portazo y vayáse murmurando algo.
- Nunca confíe en apariciones misteriosas en el chat que le ofrezcan noches de pasión. Cierre siempre su sesión de mensajería instantánea y elimine los mails comprometedores. Ya sabemos que es muy engorroso, pero nadie lo obliga a ser infiel.
- No haga alardes de sus infidelidades: mantenga el perfil bajo en las conversaciones con su grupo de amigos y sea cauteloso seleccionando sus confidentes.
- Ensaye qué preguntas puedan hacerle y practique las respuestas, para que salgan naturales llegado el momento.
- No improvise sus coartadas. Para que una excusa sea efectiva tiene que haber sido elaborada cuidando que carezca de puntos débiles. Evite repetirlas.
- Si va a necesitar testigos, procure que ellos lo sepan. Avise a sus amigos sobre los planes que los incluyen antes de ejecutarlos.
- Elija cuidadosamente el lugar de la infidelidad. Vaya a un lugar donde difícilmente pueda ser visto por cualquier conocido.