Terminó la primera mitad del año, signada por la crisis energética -que afectó la producción nacional- y por el aumento de precios de los alimentos, aunque las estadísticas oficiales hablen de una inflación bajo control. Sin embargo, esos temas, vitales para el rumbo económico, siguen siendo materia pendiente por resolver en el segundo semestre del año, un período caracterizado por las elecciones provinciales y nacionales.
Economistas y empresarios consultados por LA GACETA coincidieron en que los comicios del 28 de octubre marcarán un punto de inflexión para la economía, pero observan que en el ciclo electoral hay un fuerte incremento del gasto público, con distribución de partidas para obras en las provincias y subas salariales.