Gonzalo Montiel denunció a su abogado, Nicolás Payarola, por una presunta estafa de alrededor de U$S 700.000. El monto incluiría los $300 millones que el lateral de la Selección habría recibido como premio por la obtención de la Copa del Mundo en el Mundial de Qatar 2022.
Payarola conoció a Montiel en marzo de 2023. Por ese entonces, el futbolista jugaba en el Nottingham Forest y había sido denunciado por una joven por un supuesto abuso. “Al ser una persona recomendada, y encontrándonos en una situación conmocionante y sin conocer abogados penalistas, decidimos contratar los servicios de Payarola para actuar rápidamente”, explicaron en la denuncia Juan Marcelo “Tito” Montiel (padre del jugador) y Jacqueline Montiel (hermana de “Cachete”) quien representa los intereses del futbolista.
En el escrito de 36 páginas, la familia Montiel aseguró que Payarola se ganó la confianza del lateral para acceder al patrimonio familiar. “Las maniobras eran posibles gracias a su poder de convencimiento, su enorme capacidad de mentir y el aprovechamiento del escaso conocimiento que tenía la familia sobre este tipo de operaciones”, detallaron.
El foco del conflicto entre Payarola y los Montiel surgió a partir de un emprendimiento inmobiliario. El abogado ofreció los servicios de su estudio, P&A, para asistir en la adquisición de un lote en la zona de Ezeiza. La intención de la familia era desarrollar un barrio cerrado. Ambas partes firmaron un convenio con honorarios valuados en U$S 1.500 mensuales.
A partir de ese momento, los Montiel aseguran que Payarola comenzó a hacer varios pedidos de dinero para trámites e inversiones, que luego formarían parte de la estafa denunciada.
El primer pedido fue de $25 millones para constituir una sociedad. Los Montiel accedieron, pero entregaron el equivalente en dólares: U$S 47.000. Payarola afirmó que, como la sociedad aún no había sido publicada en el Boletín Oficial ni contaba con cuenta bancaria, el dinero sería depositado en una entidad de San Isidro.
El segundo requerimiento fue de U$S 200.000, supuestamente para la compra del terreno. Ese monto correspondería a la primera cuota de una carta oferta por un total de U$S 600.000. El 14 de julio de 2023, Montiel entregó el dinero y firmó la documentación ante un escribano llamado Martín Mezzini.
Otra maniobra denunciada habría ocurrido en agosto de 2023. El abogado, al enterarse de que Montiel tenía U$S 160.000 depositados en el banco Credicoop, le ofreció invertirlos con sus “conocimientos financieros”. “Nos dijo que conocía un método financiero rentable que consistía en ‘invertir en dólar MEP’”, relataron los Montiel.
El cuñado de Montiel, un partícipe clave en la historia de la estafa
El esposo de Jacqueline y cuñado de Montiel, Brahim López, fue clave para descubrir la presunta estafa. El abogado comenzó a trabajar en el estudio de Payarola y detectó una serie de “anomalías”.
El último desembolso fue de U$S 290.000, supuestamente para que la inmobiliaria acreditara su capacidad “técnica, operativa y financiera” ante el Registro de la Propiedad Inmueble bonaerense. Según la denuncia, las maniobras de Payarola incluyeron certificaciones de ingresos falsas, con la presunta colaboración del contador Héctor Corgo.