
La Libertad Avanza ha definido a quién enfrentar en los comicios de medio turno. Y eso se evidenció en los últimos días con la confrontación verbal entre el presidente Javier Milei y Cristina Fernández de Kirchner. El mandatario nacional potencia la puja con la presidente del Partido Justicialista. El último enfrentamiento tuvo como eje la Marcha del Orgullo Antifacista y Antirracista, realizada el sábado en todo el país. “Las dos marchas más multitudinarias en rechazo a las políticas del gobierno libertario no fueron ideológicas, sino que reflejaron aspiraciones y emociones profundas de la sociedad argentina”, escribió la ex Presidente en su cuenta en “X”.
El Gobierno no tardó en contestar. Fue el vocero presidencial, Manuel Adorni, el primero en contestar a Cristina. “Hablan del ‘derecho a la prosperidad’ aquellos que hundieron en la pobreza al 57% de la población y dejaron pobres a 2 de cada 3 niños en la Argentina”, sentenció el funcionario a través de su cuenta de “X”. Este concepto fue reforzado ayer por el jefe de Gabinete, Guillermo Francos, que recordó el daño que la gestión kirchnerista le causó a la Argentina, desde su punto de vista. “El desarrollo que ha tenido el Estado a costa de la pobreza de los argentinos ha sido impresionante”, señaló en declaraciones radiales. “La decadencia de este país ha sido enorme y no lo puede negar nadie. Tienen que hacerse cargo. Por más que mande un tuit de dos páginas, tratando de utilizar la verba que utilizaron, la realidad es la que es”, continuó Francos respecto de las críticas de Cristina hacia Milei, a la vez que le restó importancia a la convocatoria del sábado.
El jefe de Gabinete consideró, además, que el Presidente, en su mensaje en Davos, fue mal interpretado. “Somos un gobierno liberal, promovemos el liberalismo y la libertad como eje de toda su acción política y de su ideología”, remarcó el funcionario.
El oficialismo aprovecha la diáspora en Buenos Aires entre las fuerzas que responden a la conductora del peronismo nacional y el gobernador de esa provincia, Axel Kicillof. Este escenario se complementa con las dudas de los gobernadores que fueron electos a través de Unión por la Patria y que, en la actualidad, no responden directamente al PJ. La nacionalización de las elecciones es una idea que subyace en uno y otro lado de la política. Sin embargo, el desdoblamiento de los comicios causa dudas entre las fuerzas que competirán en octubre de este año por la renovación de bancas en el Congreso nacional.
Un sondeo realizado por Isasi/Burdman Consultores Políticas, señala que el 60% de los ciudadanos consultados en distintos puntos de la Argentina se opone al desdoblamiento de las elecciones ya que, según el criterio mayoritario, implicaría más gastos de la política en tiempos de ajustes. En cambio, el 82% de esa población censada está de acuerdo con la eliminación o suspensión de las Primarias Abiertas, Simultáneas y Obligatorias (PASO). Casi el mismo porcentaje está también de acuerdo con la sanción en el Parlamento del proyecto sobre Ficha Limpia.
La Cámara de Diputados iniciará hoy la actividad en el marco de las sesiones extraordinarias con un plenario de las comisiones que debatirá la reforma electoral que contempla la derogación de las PASO. El oficialismo intenta que ese tema sea incluido en la sesión prevista para el jueves. Frente a la dificultad para alcanzar los números necesarios para su sanción, la Casa Rosada modificó su idea original. Hoy menciona la suspensión de esas primarias sólo por este año. “La PASO es otra locura del gobierno de los Kirchner, que inventaron por una necesidad política, pero la realidad es que no han servido para nada y tienen un costo enorme”, afirmó Francos. “No tenemos los votos en el Congreso, no nos alcanza, pero si dan para suspender estamos seguros que en la próxima elección vamos a tener más legisladores y más fuerza para eliminarlas definitivamente y poder avanzar en las reformas que nos faltan”, continuó el jefe de Gabinete de la Nación.
Según Julio Burdman, doctor en Ciencia Política, la sociedad en general siempre está más de acuerdo de acortar el calendario electoral que ir demasiadas veces al cuarto oscuro. “No sólo por el desgaste que implica una campaña proselitista, sino también por los costos de que demanda”, indica el consultor en diálogo con LA GACETA.
Respecto del caso Cristina, Burdman señala que hasta mediados del año pasado ella no figuraba entre los principales líderes. “Ahora la subieron al ring y, así, fue creciendo en su identificación como referente opositora, pero no en su imagen”, acota. En este aspecto, el sondeo indica que es apoyada por un 26% de los sondeados, pero rechazada por el 66% de los consultados.