Seis jóvenes reviven una música anciana

Son seis jóvenes que tocan y bailan a los viejos clásicos. En el arte no hay fronteras temporales, y lo demuestran los Héroes del Swing, que recuperan los ritmos del jazz norteamericano de las décadas del 20, 30 y 40 del siglo pasado, cuando el género se abría a la danza.

Este grupo de guitarra eléctrica, contrabajo, batería, piano y pareja de baile actuará esta tarde en el cierre del Tucumán Jazz, para recrear en sus formas y contenido el estilo de una época de oro. Marina Quiroga, Hernán Fridman, Fernando Montardit, Germán Weigert, Tavo Doreste y Leandro Provera prometen un homenaje a varios de sus héroes, como Ella Fitzgerald, Duke Ellington, Louis Armstrong, Count Basie, Sammy Davis Jr. y BB. King, entre otros. “Con un repertorio muy variado y lleno de matices”, al decir de la única mujer de la banda, la voz arriba y abajo del escenario.

“A lo largo del tiempo, el jazz fue mutando, lo que mostró su posibilidad de combinar la riqueza de las músicas de todo el mundo. Se convirtió en una música anciana y, al mismo tiempo, llena de experiencia y conocimiento. En nuestra formación hay músicos y bailarines, y yo vengo a ser el nexo en grupo, ya que cumplo ambas funciones. La convocatoria que logramos en el público depende de muchísimos factores e intentamos pensar en la mayor cantidad de detalles que sea posible para cada una de nuestras presentaciones”, señala Marina.

Antes del show como tal, Quiroga y Provera darán una clase abierta para aprender los elementos básicos para bailar swing. “Queremos que la gente pueda meter el cuerpo y ser parte de la escena a la que buscamos transportarlos -anticipa-. Vivimos la contradicción de sentir actual esta música al revivirla y saber que es pura ilusión”.