La desnudez de la mujer es obra de Dios

Algunos Proverbios del Infierno, escritos hace doscientos años, por William Blake.

10 Sep 2016
1

No es una foto ilustrativa, es Monica Bellucci, ejemplo real de la sentencia de Blake.

Para el título de este post elegí uno de los tantos Proverbios del Infierno, del poeta e ilustrador inglés William Blake.

Gigante en una visión universal del hombre y de la mujer, lúcido pensador y profundamente humano, Blake supo decir en prolijas y certeras octavas, por ejemplo, que las guerras eran hechas por los ministros de Dios: los sacerdotes y los reyes. (Ver video)

William Blake fue un poeta, pintor y grabador inglés que nació en Londres en 1757 y se murió un domingo de agosto de 1827 en esa misma ciudad.


Entre sus escritos están estos Proverbios del Infierno:



En tiempo de siembra, aprende; en tiempo de cosecha, enseña; en invierno, goza.

Conduce tu carro y tu arado sobre los huesos de los muertos.

El camino del exceso conduce al palacio de la sabiduría.

La Prudencia es una vieja solterona rica y fea cortejada por la Incapacidad.

Aquel que desea pero no obra, engendra peste.

El gusano perdona al arado que lo corta.

Sumerge en el río a aquel que ama el agua.

El necio no ve el mismo árbol que ve el sabio.

Jamás se convertirá en estrella aquel cuyo rostro no irradie luz.

La Eternidad está enamorada de las obras del tiempo.

La abeja laboriosa no tiene tiempo para la tristeza.

El reloj cuenta las horas de la necesidad, pero ningún reloj puede contar las horas

de la sabiduría.

Ningún pájaro se eleva demasiado alto, si vuela con sus propias alas.

Un cuerpo muerto no venga las injurias.

Si el necio persistiera en su necedad se volvería sabio.

Villanía, máscara de la astucia. Pudor, máscara del orgullo.

Las prisiones están construidas con piedras de la Ley, los burdeles con piedras de la Religión.

El orgullo del pavo real es la gloria de Dios. La lujuria del chivo, la generosidad de Dios. La cólera del león es la sabiduría de Dios.

La desnudez de la mujer es la obra de Dios.

Exceso de pena, ríe. Exceso de alegría, llora.

El rugido de los leones, el aullido de los lobos, la cólera del mar tempestuoso y la espada destructora son porciones de eternidad demasiado grandes para el ojo del hombre.

La zorra cautiva no acusa sino a la trampa.

La alegría, fecunda; el dolor da a luz.

Dejad que el hombre vista la piel del león y la mujer el vellón de la oveja.

El pájaro, un nido; la araña, una tela; el hombre, la amistad.

El necio egoísta y sonriente, y el necio triste y ceñudo serán tenidos por sabios y servirán de norma.

Evidencia de hoy, imaginación de ayer.

Un pensamiento llena la inmensidad.

Está listo siempre a decir siempre tu opinión, y el ruin te evitará.

Todo lo creíble es una imagen de la verdad.

Nunca perdió más tiempo el águila que cuando escuchó las lecciones del cuervo.

La zorra se provee; pero Dios provee al león.

Los tigres de la cólera son más sabios que los caballos del saber.

Del agua estancada espera veneno.

Nunca sabrás lo que es suficiente a menos que sepas lo que es más que suficiente.

Escucha el reproche de los necios: es un título real.

El débil en coraje es fuerte en astucia.

Si otros no hubiesen sido necios, nosotros lo seríamos.

El alma llena de dulce placer no puede ser manchada.

En un águila miras una porción de genio. ¡Alza la cabeza!

Así como la oruga elige las hojas más hermosas para poner sus huevos, el sacerdote deposita su maldición sobre los mejores goces.

Crear una sola flor es trabajo de siglos...

La maldición fortifica; la bendición relaja. El mejor vino es el más viejo, la mejor agua es la más nueva. Las plegarias no aran; las alabanzas no maduran.

Las alegrías no ríen. Las tristezas no lloran.

Exuberancia es Belleza.

El progreso traza los caminos rectos; pero los caminos tortuosos, sin progreso, son los caminos del genio.


@Cesario

El poema Lullaby (Canción de cuna) escrito por William Blake, en el disco Elemental, de Loreena McKennitt.

Comentarios