28 Mayo 2022
Los países miembros de la Organización Mundial de la Salud (OMS) han aceptado una propuesta inicial de Estados Unidos para reformar las normas relativas a los brotes de enfermedades, conocidas como el Reglamento Sanitario Internacional (RSI), después de que esta semana se superara la oposición de África y otras naciones. Las enmiendas, una vez confirmadas por la asamblea de la OMS, son uno de los pocos resultados concretos de una reunión que se considera una oportunidad única para que la agencia sanitaria de Naciones Unidas refuerce su papel tras los 15 millones de muertes que se produjeron durante la pandemia de covid-19.
La reforma solicitada por Washington y respaldada por otros países, como Japón y la Unión Europea, es el primer paso de una reforma más amplia del RSI, que establece las obligaciones legales de los países en relación con los brotes de enfermedades, y que se espera que dure hasta dos años. La nueva propuesta, que aún debe ser aprobada formalmente por la asamblea, se refiere ahora a los pasos para abordar las cuestiones de equidad, un tema clave para los países en desarrollo, incluidos muchos de África, que buscan garantías sobre el reparto de vacunas y tratamientos para futuras emergencias sanitarias.
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