Por Bruno Farano
11 Noviembre 2021
QUÉ FELICIDAD. Un hincha muestra con orgullo la entrada para el partido del lunes contra Tigre. La Ciudadela lucirá sus mejores galas en un duelo trascendental. LA GACETA / FOTOS DE ANTONIO FERRONI
El juego contra Tigre es una final para San Martín. Más allá de que, si supera la prueba aún le quedará por delante un juego más para cumplir el ansiado objetivo, los dirigidos por Pablo De Muner el lunes disputarán el partido más importante de los últimos tiempos.
El “Santo” necesita ganar para asegurarse un lugar en el duelo decisivo que definirá el primer pasaje a la Liga Profesional; y sus hinchas comenzaron a jugarlo mucho antes del pitazo inicial.
Ayer, en el inicio de la venta de entradas, el paso de fanáticos por las boleterías montadas en el hipódromo y en las oficinas ubicadas en Maipú 50 fue incesante. Desde poco antes de las 9, los socios comenzaron a adquirir los tickets para no quedarse afuera de un juego crucial. Incluso, muchos socios e hinchas que no estaban incluidos en la prioridad número 1 llegaron hasta tirarse un lance con tal de asegurar su lugar. “Fue muy grande la respuesta. La ansiedad es enorme y muchos intentaron obtener lo antes posible su lugar”, le confiaron a LG Deportiva desde la dirigencia “santa”
En Bolívar y Pellegrini todos saben que a este tipo de duelos se los juega con la mente, el corazón y mucho más. “El hincha va a ser un plus”, admitió De Muner desde el mismo momento en el que se había anunciado el regreso del público a los estadios del fútbol argentino. Y en este caso, todos quieren aportar su granito de arena para que San Martín sume los tres puntos que necesita para poder disputar la finalísima contra el mejor de la zona B.
El grupo “Si quieren ver fiesta”, integrado por varios hinchas y supervisados por el dirigente Maximiliano Plaza, comenzó a armar un recibimiento acorde a la situación. La idea es organizar un “papelazo” (para ello solicitaron el aporte de papeles, que se recibirán todos los días en el estadio) y ponerle un marco bien colorido al juego. “Vamos a repartir banderitas y banderones, globos rojos y blancos y desplegaremos un telón en la tribuna de calle Pellegrini”, relató Franco Medina, uno de los organizadores de una movida que tiene como objetivo armar una verdadera fiesta como agradecimiento al plantel por la campaña y el esfuerzo realizado hasta aquí. “Siempre lo hicimos. Últimamente, por la pandemia, no se podía; pero ahora queremos volver teniendo en cuenta que es ‘el’ partido. La idea es demostrarle nuestro cariño y apoyo a todos los jugadores. Esto es todo gracias al apoyo de la dirigencia”, agregó el fanático.
Faltan cinco días para el gran choque, pero en La Ciudadela los hinchas ya comenzaron a jugarlo. Saben que la unión hace la fuerza y entre todos quieren empujar para que su equipo logre el objetivo.
La receta es simple: fiesta y mucho aliento
Se viven horas de muchísima ansiedad, de tensión, de nerviosismo y de alboroto. Se lo nota en las calles, en las filas para conseguir una entrada, en las redes sociales y en cada charla de café. San Martín se juega muchísimo en el último partido de la fase regular y gran parte de sus sueños de ascenso dependen en gran medida de lo que suceda en el juego contra Tigre.
Los hinchas saben que pueden llegar a jugar un papel preponderante. Para bien o para mal, pueden inclinar la balanza; pero el pensamiento general por estas horas es aportarle un plus al equipo. “A los jugadores tenemos que transmitirles confianza y optimismo. Ellos son profesionales y conocen muy bien cómo deben jugarse estas instancias decisivas. La fidelidad y el aliento van a estar como siempre, como en cada partido”, aseguró José María Barchini, socio del “santo” y ex jefe de prensa del club. “No tenemos que entrar en el juego que proponga Tigre. Ellos ya ensuciaron la cancha el año pasado en la definición arbitraria de los torneos y seguramente querrán hacerlo de nuevo. Además, a esto hay que sumarle las designaciones de la AFA en el tema arbitraje. Ya salimos fortalecidos de muchas situaciones adversas y vamos a luchar como lo que somos: los más grandes y convocantes del norte”, agregó.
En tanto Franco Álvarez Tartaglia, otro fanático, fue más allá. “Como principal medida debemos estar tranquilos. Si bien necesitamos ganar, todo se resolverá en el segundo tiempo. El árbitro que viene es provocador; no hay que entrar en el juego. La hinchada tiene que hacer lo que mejor hace: alentar los 90’”, sentenció.
RINCÓN "SANTO"
La lluvia, un problema
Ayer, debido al mal tiempo, el plantel se dividió en dos. Los jugadores que arrastran dolencias físicas realizaron tareas kinesiológicas en el complejo “Natalio Mirkin”, mientras que el resto del grupo se entrenó en el club Banco Provincia. Hoy, si las lluvias cesan, Pablo De Muner comenzará a darle forma al equipo en el predio ubicado en Cebil Redondo.
Otra buena noticia
La resonancia que le realizaron a Hernán Lopes (había terminado el partido con Quilmes con un fuerte traumatismo en el tobillo derecho) demostró que no tiene ninguna lesión. Así, si bien aún no trabaja con normalidad, estaría en condiciones de jugar contra Tigre.
Venta de entradas
Hoy, entre las 9 y las 19, continuará la venta de entradas. En Maipú 50 podrán conseguirlas los abonados que pagaron el bono de $5.000 y los vitalicios; en el hipódromo, los socios con más de dos años de antigüedad.
Baja en Tigre
El defensor Fernando Alarcón sumó la quinta amarilla y no vendrá a Tucumán.
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