Por Nicolás Iriarte
11 Marzo 2021
GOLAZO. Lagos corre a sumarse al festejo del 1-0 que convirtió Carrera desde fuera del área. fotos de Diego Adrian Roscop
Hay torneos que funcionan como refugios. Búnkeres de protección contra lo que sea que esté pasando afuera. Históricamente, la Copa Argentina lo fue para Atlético y ayer volvió a confirmarse. El equipo de Omar De Felippe, sin poder ganar en sus cuatro partidos de la Copa de la Liga, se guareció en el torneo más federal de nuestro país y consiguió el primer triunfo de la temporada. Un claro 3-0 ante Comunicaciones que invita a confirmar la calidad del refugio que significa esta competencia y que, además, debería ayudarlo a salir, perder el miedo y repetir el resultado en el torneo local.
Claro, en frente estaba un rival de tercera categoría, no hay que olvidarse y no lo haremos a la hora de hacer el análisis correspondiente. Tampoco, que llegaba sin partidos oficiales en el lomo porque el torneo de la B Metropolitana aún no comenzó.
ALEGRÍA. La sonrisa en la cara de Carrera lo dice todo. El jugador recuperó su nivel y es una de las figuras del equipo. Con De Felippe en el banco, lleva dos goles.
También es cierto y también debe tenerse en cuenta, que a este Atlético parece costarle todo el doble. Entonces, con la cantidad de antecedentes de equipos de categorías menores superando a los de categorías superiores en la Copa Argentina, todos sabían que lo que sucedería en la cancha de Instituto no iba a ser un trámite. Al menos antes de empezar el partido.
Justamente Atlético -que usó por primera vez el refugio de esta Copa en 2012- terminó sorprendiendo a varios equipos de Primera mientras jugaba en la B Nacional en ese año. Dirigido por Juan Manuel Llop, la pasaba bastante mal en el torneo pero en la Copa Argentina llegó a semifinales y estuvo a segundos de forzar los penales contra Racing. Aquel partido en Catamarca definido por un gol en contra de Deivis Barone todavía se recuerda.
El refugio lo alojó nuevamente en 2017, ya con Ricardo Zielinski en el banco, cuando venía de quedar eliminado de forma muy dolorosa ante Independiente en la Copa Sudamericana. Días después tuvo que enfrentar al mismo rival pero en su refugio y el resultado, claro, fue otro. La carrera del “Decano” en esa edición no frenó sino hasta la final, contra River (curiosamente su rival en 16vos.).
Ayer en Córdoba, el equipo encontró lo que no había encontrado en toda la Copa de la Liga Profesional: un triunfo, goles en los segundos tiempos y resto físico. Incluso hasta podría decirse que el rendimiento del “Decano” fue de menor a mayor, algo inédito para este equipo. Los primeros tiempos, en el torneo local, eran lo mejor de Atlético y eso se mantuvo hasta el último sábado, cuando se fue al descanso 1-0 ante Lanús. Una sensible baja en el juego y en el físico, permitieron dos goles “granates” para dar vuelta el marcador. Goles en la segunda parte como los que también le marcaron Unión, Central Córdoba y Huracán.
VOLVIÓ. Cristian Erbes regresó al equipo titular luego de la expulsión ante Huracán y aunque no lo exigieron mucho, el volante respondió siempre en el medio.
Ayer, todo fue diferente. En el primer tiempo, Atlético tuvo la pelota pero no hacía daño. Los ataques por izquierda comandados por Gabiel Risso Patrón (de muy buen partido) parecían ser redituables pero nunca incomodaron seriamente al rival. En el segundo, Ramiro Carrera hizo mucho daño. El jugador sacó un remate inatajable al ángulo desde fuera del área para abrir el marcador. Luego asistió a Augusto Lotti para que marcara el segundo.
Las ocasiones de gol, ausentes al principio, se multiplicaron en el complemento. Varias de ellas llegaron gracias a un gran partido de Ramiro Ruiz Rodríguez. Una de esas terminó con un gol de Javier Toledo. Vaya si esta Copa fue su refugio tras más de 10 partidos sin anotar. Veremos si sigue siéndolo o el equipo se anima a salir y a repetir en la Copa de la Liga.
NOTICIAS RELACIONADAS
Lo más popular
