No hay dudas que la pandemia de covid-19 cambió drásticamente los planes de una de las fechas más convocantes del santoral católico. Es que hoy se celebra el día de San Cayetano, el patrono del trabajo, pero -a diferencia de años anteriores- los fieles únicamente sólo pueden visitar el templo para rezar y luego deberán retirarse, previo procedimiento de sanitización y control de temperatura.
El padre Savino Tapia -párroco de San Cayetano- y el arzobispo de Tucumán, monseñor Carlos Sánchez, oficiarán una misa sin presencia de fieles. La imagen del santo -en tanto- fue llevada por el centro de la ciudad en una camioneta.
Así, con esta pandemia, atrás quedaron esas imágenes donde se veían largas colas con miles de fieles que concurrían a la festividad religiosa cumpliendo sus promesas de asistencia, pidiendo por el trabajo que falta o dando gracias por lo que ya tienen.
Hoy, en tanto, a los fieles que van a visitar al santo se les toma la temperatura; se hace ingresar de a cinco personas y no se puede tocar las imágenes.
LA GACETA realizó una serie de imágenes comparando el antes y el después tras la pandemia por el coronavirus.
Antes de la pandemia
Un 2020 totalmente distinto