"Alejozaaap": el fan de los cómics que se convirtió en youtuber

Apunta de tecleos y de captions, desde que las redes sociales y YouTube coparon el ciberespacio, una nueva revolución cultural fue calando duro en la sociedad. Diversión, consejos, éxito y un feedback constante son parte del atractivo que cautiva -día a día- a cientos de usuarios. Entre ellos está Alejo Cruz, un joven tucumano que, bajo la promesa de “ser escuchado”, decidió unirse a la comunidad de aquellos seres llamados youtubers. Así es como surgió @alejozaaap: un canal dedicado a las novedades del universo cinematográfico de superhéroes y la narración de cómics creados por Marvel y DC Comics.

El proyecto comenzó despacio, a prueba y error para evaluar la reacción de los usuarios y recién ahí dar el golpe de gracia. Desde entonces ya pasaron cinco años y en ese tiempo, Alejo pudo experimentar los cambios de la plataforma hasta convertirse en el monstruo de contenido multimedia que es ahora. “En aquel momento YouTube estaba menos profesionalizado y uno podía incursionar en el ambiente sin tanta tecnología -rememora el compositor de 31 años, oriundo de Tafí Viejo-. En cambio, hoy las grabaciones no son tan caseras e improvisadas. Necesitás filmarte con buenas cámaras y micrófonos para lograr una oportunidad”.

Eso sí (con ya 819 mil suscriptores bajo la galera) hay que hacer propia la frase de la película de Spider-Man: “un gran poder, conlleva una gran responsabilidad”. Como gaje del oficio, el youtuber considera que el trabajo que implica producir videos es subestimado. En su rutina, editar las grabaciones puede tardar de tres a siete tediosas horas. Y en las filmaciones de blogs o sketches la acción de estar “con la cola en la silla” alcanza las 14 horas de posproducción.

Acá es cuando comienzan las reflexiones porque, al igual que en la ficción, el éxito de los personajes implica perseverancia y suerte. “Es verdad. Sí se puede subsistir de YouTube, e incluso muy bien. Hay canales que ganan 'sueldos' similares al de un ejecutivo en una empresa internacional, pero es difícil. Tenés que esforzarse y dedicarle tiempo para conseguir grandes audiencias y vivir de esto sin necesitar otro empleo”, confirma el fan de la Sci-Fi. De fondo, unos cuadros de Batman, Hulk y Iron Man junto a varias figuras coleccionables ambientan su estudio de grabación.

Mamá, quiero ser youtuber

Con la promesa de divertirse sin culpas, viajar y recibir regalos por hablar de lo que les gusta, ser youtuber se convirtió en una vocación aspiracional para los centennials y los más pequeños. “Y no está mal que sueñen con esto, aunque creo que no son conscientes de la dedicación que implica tener un canal. Hay que saber bastante sobre edición, el manejo de equipos y enganchar una temática interesante para la audiencia. Muchas personas piensan que automáticamente van a ganar un montón de dinero, cuando en realidad tardás años en empezar a ver algunos centavos”, enfatiza Alejo, quien espera obtener dentro de cinco meses el Botón de oro. Mención que entrega el sitio web por llegar al millón de seguidores.

Al otro lado de la PC, su público -de 15 a 40 años- lo alienta con likes y campanitas activadas. “Al principio fue difícil porque mis amigos y mi familia se burlaban. Les parecía una tontería, un sueño ridículo. Cuando progresó el canal recién empezaron a tenerme respeto”, recuerda. Esta evolución demostró dos detalles importantes: no necesariamente el ombligo de YouTube está en Buenos Aires. Y, en la plataforma, los adultos también tiene su lugar. Ya sea como fanáticos o como creadores de contenido.

“La noción de que ser youtuber era algo inalcansable cambió. Lo demuestra el incremento de cuentas de todas partes del mundo. Aunque sí es cierto que hay menos facilidades para alguien que es del NOA o del interior. Nosotros trabajamos con marcas, eventos y convenios, pero la mayoría de las firmas que buscan la presencia de youtubers son de Capital”, aclara Alejozaaap en relación a las dificultades en el marketing y los negocios. ¿Será que en el territorio virtual podremos borrar las fronteras?

Premios: dependen del número de “fans”

Conocidos como botones (YouTube Play Button, en inglés), la primera distinción es entregada por la plataforma cuando llegás a los 100 mil suscriptores. Le sigue la placa Gold play button -al alcanzar un millón de usuarios registrados- y el Premio de diamante para creadores que tengan 10 millones de seguidores. Por último, está el Botón de rubí, otorgado a canales que alcancen un público de 50 millones.

Cómo ganar dinero: las publicidades son cotizadas en dólares

Para comenzar a recibir dinero hay que adherirse al Programa para partners de YouTube (YPP). Y, en cuanto al sistema, la empresa remunera en dólares la cantidad de visitas que tengan los videos. El motivo es que, a través de AdSense (plataforma de anuncios de Google), YouTube direcciona hacia ellos las publicidades. Por eso, la monetización depende de la cantidad de clicks que reciben los anuncios y del tiempo en que se los mire. Acá viene la regla del Costo por mil reproducciones (CPM): cada vez que se supera esta cantidad la plataforma y el youtuber ganan (en promedio) U$S 0,60. En Argentina los pagos pueden recibirse a través de una transferencia bancaria. ¿El inconveniente? Al ser un envío internacional (el dinero proviene de Estados Unidos) los bancos cobran una comisión. Para evitar la merma, la mayoría de los creadores se manejan vía Western Union.