Se encienden luces rojas para el intercambio comercial argentino

> COMERCIO EXTERIOR

CARLOS M. BILLONI Y EDUARDO L. FRACHIA

ECONOMISTAS DEL IAE BUSINESS SCHOOL DE LA UNIVERSIDAD AUSTRAL

El intercambio comercial argentino experimentó un conjunto de shocks domésticos importantes durante el inicio del gobierno de Mauricio Macri, tales como la devaluación, la eliminación/reducción de retenciones, y la relajación de las restricciones a las importaciones. Todas las medidas tuvieron como objetivo la mayor apertura comercial, ya que no sólo se pretendieron fomentar las exportaciones, sino también las importaciones.

Por un lado, la búsqueda de incrementarlas ventas al exterior tuvo como objetivo asegurar un mayor ingreso de divisas y recuperar el superávit comercial que se había perdido. De acuerdo con las medidas adoptadas, la intención del gobierno pareció estar destinada a modificarla estructura económica hacia una economía más intensiva en la producción de bienes transables, en particular en aquellos bienes sobre los cuales Argentina posee ventajas comparativas a nivel mundial como lo son los productos agropecuarios. Por otro lado, la relajación de las restricciones para las compras en el exterior pareciera haber tenido un objetivo más bien de disciplinamiento de los precios internos. La apreciación real del tipo de cambio luego de la salida del cepo compensó en gran medida la contracción del ingreso doméstico en 2016. Si bien las importaciones cayeron en valor, se incrementaron en cantidades. El fuerte crecimiento de las importaciones vino en 2017 el cual, sumado al estancamiento de las exportaciones, terminó agravando de manera importante el déficit comercial.

En 2017, la recuperación de la economía combinada con una importante apreciación cambiaria y un mayor grado de apertura comercial significó la aparición de un nivel de déficit comercial récord. El déficit alcanzó los U$S 8.472 millones, superando ampliamente el anterior récord de U$S 5.751 millones de 1994. Mientras que las exportaciones crecieron apenas 0,9%, las importaciones aumentaron 19,7%. El flojo desempeño de las exportaciones se explica por la contracción del os Productos primarios (-5,7%)y las Manufacturas de Origen Agropecuario (MOA) (-3,7%) que aplacaron la recuperación de las MOI (11,1%) y de la exportación de Combustibles y energía (18,6%). Las importaciones, en cambio, crecieron en todos los usos de manera muy importante, destacándose los Vehículos de pasajeros (40,9%), Bienes de capital (23%) y Bienes de consumo (20,9%).

En lo que va del año se viene observando una persistencia en la tendencia hacia un mayor déficit comercial. Pese a la reacción de las exportaciones (crecieron 11% y 10% en enero y febrero), el crecimiento de las importaciones sigue acelerándose. En los primeros dos meses del año

, la mejora de las exportaciones fue insuficiente frente al aumento de las importaciones lo que significó un crecimiento del déficit comercial acumulado de casi el 600%, alcanzando los U$S 1872 millones.

En cuanto al comportamiento sectorial de las exportaciones se viene observando una mejora del sector agropecuario (12% de crecimiento de los Productos primarios), aunque en marzo estaría muy afectado por las condiciones climáticas. Las Manufacturas de Origen Industrial (MOI) vienen evidenciando una importante recuperación en el primer bimestre con un crecimiento del 19% impulsado fundamentalmente por el sector automotriz, liderado por el efecto Brasil. Por el lado de las importaciones, se observa un crecimiento en todos los usos, destacándose Bienes de capital (18%), los Combustibles y lubricantes (58%) y los Bienes de Consumo (26%). En términos de cantidades todos los usos se mantienen creciendo por encima del 20%, con Bienes de Consumo y Bienes de Capital creciendo 22%.

> Empresas alemanas
Dos de cada tres compañías que operan en la Argentina aumentarán sus inversiones este año
El presidente de la Cámara de Industria y Comercio Argentino-Alemana, Guillermo Brinkmann, aseguró que empresas del país europeo con presencia en territorio argentino aumentarán sus inversiones este año. “Es muy positiva la visión que las firmas alemanas tienen de la Argentina. De hecho, dos de cada tres empresas alemanas prevén aumentar sus inversiones este año”, aseguró. El titular de la empresa de servicios informáticos SAP,  que a principios de este mes asumió como nuevo presidente de la cámara alemana, subrayó: “Nadie que piense aumentar sus inversiones está viendo la cosa mal, sino lo contrario. Se ven varios años hacia adelante de progreso y crecimiento, si no, no hay inversión a corto plazo”. También aseguró que “hay un demostrado interés de empresas alemanas de venir a la Argentina a invertir”. Y remarcó: “en los últimos dos años, hay nuevas compañías que se radicaron en el país”. “Con las actividades que llevamos adelante en ferias y foros internacionales, actuamos como una puerta de entrada a la Argentina para promover negocios”, puntualizó Brinkmann. Y precisó que el interés de las empresas alemanas en Argentina está en “los sectores de energías renovables, hidrocarburos no convencionales, agronegocios, industria y servicios”. (Télam)

> Importaciones 
Las importaciones están complicando a la industria nacional. ¿cuáles son las alternativas para revertir esta situación?
Las importaciones vienen creciendo a un ritmo muy importante desde marzo del año pasado (24% interanual, en promedio). Gran parte de la industria nacional no estaba acostumbrada a competir contra los productos importados y la eliminación de las restricciones a las importaciones se implementó en un contexto de apreciación cambiaria y baja productividad. Frente a esta situación, muchas empresas nacionales se enfrentaron con un escenario complicado debido ala imposibilidad de competir vía precios (el factor más relevante en este contexto). En general todos los rubros de las importaciones presentaron en los dos años de gestión de Cambiemos un importante crecimiento aunque se destaca por su impacto el mayor ingreso de los bienes de consumo importados. Las principales ramas afectadas por la mayor demanda de bienes externos han sido las industrias textil e indumentaria, calzado, alimentos, y bienes de capital, en particular en el segmento PyME.
En el corto plazo, no se espera que el gobierno adopte medidas de política que podrían revertir parcialmente esta tendencia tales como mejorar la competitividad vía precios (depreciación del tipo de cambio real) y/o medidas arancelarias en favor de los sectores más vulnerables. En el mediano y largo plazo, fomentar la apertura comercial de manera sostenible sólo será posible mediante la mejora de la competitividad basada en el crecimiento de la productividad gracias a una mayor inversión.

> Déficit comercial
¿Qué políticas públicas podrían impulsar este año un cambio de tendencia en la balanza comercial?
La tendencia de la balanza comercial es hacia un mayor déficit. El crecimiento de las importaciones se explica por tres factores. En primer lugar, por la eliminación de restricciones impuestas durante el gobierno anterior con las cuales contenían de gran manera la entrada de bienes extranjeros al mercado local. En segundo lugar, atraso del tipo de cambio real aún presente. En tercer lugar, la recuperación de la actividad económica también está impulsando las importaciones en especial en bienes de capital y maquinarias y en equipos, gracias al crecimiento de la inversión. Para lo que resta del año se espera que los tres factores sigan actuando en el mismo sentido: mayor apertura comercial, estabilización del tipo de cambio real y crecimiento económico.
Por el lado de las exportaciones, éstas enfrentan hoy un problema de baja competitividad, debido al atraso cambiario (altos costos en dólares) y a la baja productividad. Pese al importante crecimiento en materia de inversiones, la mejora en la productividad de las empresas exportadoras llevará tiempo. El objetivo del gobierno en materia de comercio exterior es continuar abriendo la economía, priorizando las exportaciones del sector primario. En este contexto, la única forma de quebrar la tendencia observada en el corto plazo pareciera ser el aumento del tipo de cambio real (algo poco probable), con lo cual se podrían contener las importaciones y fomentar aún más las exportaciones, en particular las del sector agropecuario.

> tendencia marcada
¿Cuáles son hoy las perspectivas y qué oportunidades hay para el mediano plazo?
Para este año se espera que continúe la tendencia hacia un déficit comercial creciente. Las exportaciones terminarían cerca de los 60.000 millones de dólares y las importaciones en torno de los 70.000 millones, cerrando así el año con un déficit comercial cerca de los 10.000 millones de dólares. El comercio internacional se está recuperando gracias al crecimiento de las economías avanzadas. Los precios de los commodities dejaron de caer e incluso algunos comenzaron a recuperarse. La demanda de productos primarios de China, Estados Unidos y la zona euro comenzará a revitalizarse.