Respuestas claves para entender el caso

¿Por qué pidió un subsidio el enfermero?
A mediados del año pasado, Luis Sebastián Made solicitó una ayuda en ATSA para su madre enferma. El enfermero explicó que no contaba con recursos para costear los pasajes, ya que debía llevarla fuera de la provincia para una consulta médica.

¿Por qué concurrió a ATSA?
El enfermero, como muchos afiliados del gremio, concurrió a la sede de Suipacha al 500 para pedir ayuda. Allí habló con dirigentes afines al secretario general, Reneé Ramírez, quien a la vez es legislador del bloque oficialista Tucumán Crece.

¿Hay otros casos similares?
Es una firme posibilidad. De hecho, LA GACETA accedió a otros comprobantes de gastos sociales con los montos a percibir en blanco. Los beneficiarios también serían trabajadores de la salud, pero hasta ahora sólo Made confirmó la situación

¿Made sabía que se trataba de “gastos sociales”?
El enfermero asegura que en todo momento pensó haber estado gestionando un aporte a través de ATSA. Cuando LA GACETA le exhibió el comprobante de la Legislatura, Made reconoció que allí figuraban su firma y su DNI.

¿Por qué firmó un comprobante en blanco?
“Yo sólo estaba gestionando ayuda para mi madre”, afirmó el enfermero, que no imaginaba verse involucrado en el caso de los gastos sociales legislativos. Aseguró que recibió unos $4.000 y que pecó de exceso de confianza al poner su firma.

¿Podría haber sido Made víctima de un delito?
El enfermero dice que revisará la situación con su abogado. Si sus datos fueron usados de modo irregular para justificar gastos mayores a $ 4.000, aprovechando su firma en el recibo en blanco, estaría en condiciones de iniciar una demanda.

¿Ramírez justificó gastos con el recibo de Made?
El legislador manzurista y titular de ATSA negó la posibilidad de que el enfermero u otra persona haya firmado un recibo en blanco sobre los gastos sociales legislativos. Los documentos que justifican esas ayudas, sin embargo, no son públicos.

¿Ramírez cobraba los gastos sociales?
El legislador manzurista es el único de la actual conformación que admitió -en un programa de radio primero, y luego ante LA GACETA- que percibía $ 150.000 al mes para ayudas, y que no le alcanzaba para satisfacer los pedidos de los vecinos.

¿Se siguen entregando estas ayudas en efectivo?
No. Semanas después de que Ramírez admitiera el cobro de gastos sociales, el vicegobernador Jaldo dictó un decreto para derogar ese sistema, que llevaba más de dos décadas de vigencia. Además, ordenó la bancarización de las cuentas.