Según la Policía, se roban 13 motos por semana en Tucumán

Más de la mitad de las motos denunciadas como robadas son recuperadas por la Policía en la capital, según indicó el jefe de la división Sustracción de Automotores, comisario Cándido Galván. Sin embargo, no todas las personas que circulan en rodados con pedido de secuestro por ese delito terminan detenidas.

Los policías de esa sección suelen realizar controles sorpresivos en distintos puntos de la ciudad. El trabajo consiste en pedirles a motociclistas y automovilistas que detengan la marcha, solicitarles la documentación del vehículo y, con esos papeles, requerirle un informe a la Oficina de Verificación de Dominio para detectar si existe alguna irregularidad. De esa manera, consiguen recuperar varios rodados que tenían pedido de secuestro por robo.

Según indicó Galván, en la capital reciben un promedio de 13 denuncias semanales por robos de motocicletas. Y, en ese mismo período de tiempo, los uniformados a su cargo consiguen recuperar entre siete y 10 motos robadas. Lo que escapa a los policías es la decisión de adoptar medidas en contra de las personas que conducen esos rodados, que es responsabilidad de la Fiscalía de Instrucción de turno.

“Todo depende de la fecha del hecho”, aclaró Galván. “No es lo mismo alguien que compró el vehículo hace un par de años y que tiene documentación, en cuyo caso la moto o el auto pudieron haber ido pasando de mano en mano, que cuando se trata de un hecho reciente. En este último caso, la Fiscalía sí suele ordenar medidas privativas de la libertad”, explicó.

Los barrios

En la capital, la mayoría de los robos de motos se producen en la periferia, según indicó el comisario. “Generalmente las levantan de la calle, cuando los propietarios las dejan estacionadas sin sistema de seguridad o en lugares oscuros o con poca gente”, comentó Galván.

En ese sentido, indicó que existen dos modelos que encabezan el ranking de motos robadas. “Las que más roban son la Honda Wave y la Honda CG, que son las que más se comercializaron en el último tiempo, las que más hay en el mercado”, explicó.

Por el contrario, en el caso de las motocicletas de alta gama, que suelen tener un valor superior al de algunos autos, los robos son menos frecuentes. Esto se debe -según dijo el comisario- a que esos rodados cuentan con sistemas de seguridad más eficientes y a que son más difíciles de ocultar o pasar desapercibidas.

En cuanto al mercado negro de motos, la mayoría de las veces se publicitan de boca en boca o mediante páginas de internet dedicadas a la compra-venta de vehículos, donde los vendedores quedan menos expuestos. Los precios suelen ser un 50% menor al valor original de la moto o más baratos todavía.