“Yo, Ariel García, no tengo ninguna muerte ni caso impune”

El mensaje navideño de “noche de paz, noche de amor” no parece tener cabida en la tensa relación política entre el intendente de Bella Vista, el alperovichista Luis Espeche, y el legislador radical Ariel García, referente local del movimiento “Boina Blanca”. En la edición de ayer, tras varios cruces mediáticos, el jefe municipal había dicho que solicitaría custodia policial para su casa y para su oficina por temor al dirigente opositor, ya que “los García tienen dos muertes impunes”. Ahora, el parlamentario anticipó que también irá a la Justicia, aunque para demandar por injurias al funcionario oficialista. “El temor de Espeche, en realidad, es por ser el primer intendente de la década robada de Tucumán que termine preso. Con sus declaraciones, en realidad busca desviar el eje de discusión, pero lo que la gente quiere saber es qué hizo con la plata de los vecinos de Bella Vista y cómo hizo para convertirse en millonario en tan pocos años”, agregó García, en su descargo.

La mala relación entre el intendente y el legislador data de hace varios meses. García es el jefe político del concejal radical Sebastián Salazar, uno de los principales rivales de Espeche en Bella Vista. El edil podría competir en 2015 por la intendencia contra la presidenta del cuerpo vecinal y “primera dama” del municipio, Cristina Romano de Espeche.

Hace una semana, la Justicia le ordenó al intendente entregar una copia de la Cuenta de Inversión de los períodos 2011, 2012 y 2013 al concejal Salazar, con lo que el opositor podrá examinar en qué gastó sus recursos la administración de Bella Vista. Según Espeche, esta situación es producto de que el radical “tiene amigos” en la Justicia por haber pertenecido a la Franja Morada. Y dijo que García se había enterado antes que él del fallo referido a la Cuenta de Inversión.

El legislador expresó, en la edición del lunes pasado, que la gestión de Espeche era “la más corrupta”. La réplica del jefe municipal no se hizo esperar. “Los García tienen dos muertes impunes. Una lleva más de 10 años, y la víctima era un menor. Todavía no se ha esclarecido. Y después está el caso de un chico que asesinaron en La Costanera. Son gente violenta. Además, el padre de Salazar fue funcionario de la dictadura militar”, aseguró el alperovichista.

Ayer, García se comunicó con LA GACETA para desmentir estos dichos. “A este tema lo vamos a hablar con Espeche en Tribunales. No voy a entrar en el camino de la injuria. Fui electo por mi militancia. Yo, Ariel García, no tengo ninguna muerte y ningún caso impune. Tengo valores democráticos; no soy un canalla mentiroso, y mucho menos un cobarde. Espeche, en cambio, es tan caradura que pide custodia policial para no pagar seguridad privada. Quienes necesitan seguridad, en realidad, son los vecinos de Bella Vista. Ellos viven la ausencia del Estado por la incapacidad de Espeche”, reafirmó el referente de los “Boina Blanca”.

Luego, casi sin tomar aire, enunció una serie de hechos polémicos protagonizados por el intendente en este tiempo. “Lo que quiere saber la gente es por qué oculta la Cuenta de Inversión; a qué destinó toda la plata que manejó en este tiempo; por qué los gitanos se llevaron a Córdoba un camión del municipio; por qué los camiones de su administración arrojan residuos en basurales a cielo abierto; por qué ejecutó menos del 50% de las obras del Plan Más Cerca I, motivo por el cual el Gobierno provincial no lo incluyó en la segunda etapa de este programa... Además, debe dejar en claro por qué pretende manchar mi militancia y la de Salazar. En realidad, nada de lo que pueda decir lo hará menos corrupto”, lanzó el dirigente radical.

Los “Boina Blanca” recibieron el apoyo del diputado José Cano. “El legislador García y el concejal Salazar no tienen ninguna causa en la Justicia, mientras Espeche acumula denuncias por la corrupción de su administración. En el Tucumán que viene, él y muchos otros terminarán presos”, dijo el radical.

Otro que cargó contra Espeche fue el ex concejal de esa ciudad, José “Pita” Leguizamón, quien fue señalado por el intendente como ladero del radical Salazar. “Yo respondo al proyecto de Cristina Fernández y del gobernador José Alperovich. Hoy trabajo en una obra social, y estoy alejado de la política. Mejor que Espeche se ocupe de trabajar, porque arruinó nuestra ciudad con su gestión”, cargó Leguizamón.