Diego Pave se despidió de San Martín: “me voy de mi casa”

Diego Pave se despidió de San Martín: “me voy de mi casa”

El arquero se sintió en deuda con el hincha, al que le agradeció su cariño

TRISTEZA. “En estos momentos siento que me voy de mi casa. Acá, en lo afectivo, viví cosas inolvidables”, dijo Diego Pave.
TRISTEZA. “En estos momentos siento que me voy de mi casa. Acá, en lo afectivo, viví cosas inolvidables”, dijo Diego Pave.
15 Noviembre 2014
“Quiero tener revancha”, con esta frase, Diego Pave sintetizó las sensaciones que siente por tener que alejarse de San Martín. El arquero es uno de los jugadores que rescindieron su contrato con la entidad de La Ciudadela luego de la eliminación del Federal A. 

El puntano, en una entrevista exclusiva con LG Deportiva, se mostró emocionado al recordar los tres años y medio que pasó en Tucumán.

- Te hubiera gustado irte de otra forma del club...

- Cuando en 2011 llegué al club lo hice con la ilusión de ganar muchas cosas con esta camiseta. Pero por diferentes motivos institucionales y deportivos que, en esos momentos se estaba viviendo, no se pudo concretar nada. Pero la ilusión más grande estaba puesta en este torneo, porque era como la última chance de conseguir el objetivo deseado. No se pudo concretar esa meta, por eso era previsible estar viviendo esta situación.

- ¿En lo personal, cómo te vas?

- Me voy tranquilo porque aunque no logré ninguno de los objetivos que vine a buscar, en todos los partidos di todo de mí para conseguirlos. Soy una persona que tiene mucha autocrítica. Por eso, aunque tuve algunos errores puntuales, sé que pude responderles a las personas que confiaron en mí. 

- Se nota la desazón que te embarga alejarte del club...

- Es que a principio de temporada dejé muchas cosas de lado para quedarme en San Martín. Terminé aceptando el ofrecimiento de los directivos porque consideraba que estaban dadas todas las cosas para conseguir el ascenso. 

- ¿Cuál fue el motivo de la frustrante campaña?

- El gran error es no haber podido mantener la base de la temporada pasada. Siempre es complicado cuando vienen muchos futbolistas nuevos encontrar rápidamente el funcionamiento esperado. En un torneo atípico como este, no tuvimos tiempo para alcanzar ese objetivo. Recibimos muchos golpes anímicos en las primeras fechas y eso nos terminó afectando en el resto del certamen. 

- ¿Fue desgastante jugar todos los partidos como una final?

- Lo que pasa que esta camiseta pesa mucho, por las presiones que se reciben desde el exterior. Todos los equipos nos querían ganar y eso los llevaba a jugarnos a muerte. Desde el cotejo con San Jorge tuvimos que acostumbrarnos a que todo nos costará demasiado. Haber ganado uno solo de los siete encuentros que jugamos en La Cuidadela nos terminó costando caro. 

- ¿Por qué estás tan conmovido?

- Me voy de mi casa. Un lugar que aprendí a querer desde el primer momento que llegué. El martes, cuando me comunicaron que no seguía, charlé sobre el tema con el utilero Dante (Bautista), que es como un padre para mí. Le dije que estaba triste porque los mejores años de mi vida profesional los viví acá. Ese día sentí una sensación extraña cuando ingresé al vestuario. Vi que ese lugar que tanto transité, ya no me pertenecía y que nada volvería a ser igual. Igual creo haber dejado las puertas abiertas para algún día regresar. Me siento en deuda con el hincha y quiero volver para saldarla.

- ¿Cómo se perfila tu futuro?

- A eso lo dejé en manos de mi representante. Por el momento, me voy a dedicar a descansar y tratar de aprovechar los momentos libres con mi novia Julieta, que es tucumana. En la provincia me voy a quedar hasta fin de mes; luego con ella nos iremos de vacaciones a San Luis y después a La Pampa, donde vive mi madre. Julieta está estudiando y le falta un año para recibirse, por lo que va a tener que regresar para empezar a rendir las exámenes que le faltan. Luego veremos cómo nos arreglamos para estar juntos.

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