31 Octubre 2013
El Gimnasio 24 de Septiembre fue creado para promover sus actividades deportivas en la provincia. Tucumán lo necesitaba y antes de que llegara el año 1900 se hizo realidad. Por allí pasaron grandes deportistas, nadadores y gimnastas. También allí Atlético jugó el primer amistoso en su rica historia. Se ubicaba en la manzana que comprendía las calles Balcarce, Marcos Paz, Santa Fe y boulevard Avellaneda (actual avenida Avellaneda). Un 18 de diciembre de 1899 fue inaugurado y tuvo actividad hasta principios de 1950.
Nació por una iniciativa de José Fierro y un grupo de personas que intercedieron ante el gobierno para que ese sueño se haga realidad. Fue así que en 1890 se establece por decreto otorgar un predio para la práctica deportiva. "El destino del establecimiento es la construcción de un gimnasio escolar, debiendo en breve dar comienzo los trabajos necesarios" rezaba el mandato.
Se nombra entonces una comisión de educadores, entre los que estaban Fierro, Ramón López y Samuel Riade, encargados de dirigir e inspeccionar los trabajos. El 14 de julio de 1897, cuando la provincia era gobernada por Lucas Córdoba, se pone en marcha la obra que un tiempo después fue inaugurada por Próspero Mena. Fue el primer escenario deportivo hecho por tucumanos, oficial y público. Estaba dotado de pileta de natación, canchas de tenis y de fútbol, salones de gimnasia (modernos aparatos adquiridos en el extranjero) y confortables tribunas de madera.
Su primer director no sería otro que Fierro, que aprovechó su gestión para difundir el deporte en el interior de la provincia: en el sur (Famaillá, Monteros y Concepción), en el este (Cruz Alta) y en el norte (Tafí Viejo).
El gimnasio cumplió durante más de medio siglo actividades fundamentales en el marco de la educación pública. Pero con el paso de los años, la desinversión y el desinterés por el lugar lo condenaron a desaparecer. El lugar que vio nacer a grandes deportistas y en cuyo campo de juego se jugaron famosos partidos interprovinciales e internacionales, no daba para más.
El abandono de las instalaciones del gimnasio se hizo más que evidente. Incluso, su histórico campo de deportes resultó ganado por la maraña y sus tribunas destruidas.
Luego de años de fantasmal presencia en la zona conocida hoy como barrio Norte, todo testimonio edilicio de lo que fue un punto de encuentro deportivo tucumano cayó bajo la piqueta. Allí, en 1962, se inauguró el hospital Centro de Salud "Zenón Santillán".
Nació por una iniciativa de José Fierro y un grupo de personas que intercedieron ante el gobierno para que ese sueño se haga realidad. Fue así que en 1890 se establece por decreto otorgar un predio para la práctica deportiva. "El destino del establecimiento es la construcción de un gimnasio escolar, debiendo en breve dar comienzo los trabajos necesarios" rezaba el mandato.
Se nombra entonces una comisión de educadores, entre los que estaban Fierro, Ramón López y Samuel Riade, encargados de dirigir e inspeccionar los trabajos. El 14 de julio de 1897, cuando la provincia era gobernada por Lucas Córdoba, se pone en marcha la obra que un tiempo después fue inaugurada por Próspero Mena. Fue el primer escenario deportivo hecho por tucumanos, oficial y público. Estaba dotado de pileta de natación, canchas de tenis y de fútbol, salones de gimnasia (modernos aparatos adquiridos en el extranjero) y confortables tribunas de madera.
Su primer director no sería otro que Fierro, que aprovechó su gestión para difundir el deporte en el interior de la provincia: en el sur (Famaillá, Monteros y Concepción), en el este (Cruz Alta) y en el norte (Tafí Viejo).
El gimnasio cumplió durante más de medio siglo actividades fundamentales en el marco de la educación pública. Pero con el paso de los años, la desinversión y el desinterés por el lugar lo condenaron a desaparecer. El lugar que vio nacer a grandes deportistas y en cuyo campo de juego se jugaron famosos partidos interprovinciales e internacionales, no daba para más.
El abandono de las instalaciones del gimnasio se hizo más que evidente. Incluso, su histórico campo de deportes resultó ganado por la maraña y sus tribunas destruidas.
Luego de años de fantasmal presencia en la zona conocida hoy como barrio Norte, todo testimonio edilicio de lo que fue un punto de encuentro deportivo tucumano cayó bajo la piqueta. Allí, en 1962, se inauguró el hospital Centro de Salud "Zenón Santillán".
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