Atlético: Si quieren guerra, habrá guerra

La fila india de futbolistas comienza a formarse. La práctica de Atlético, la primera de una semana larga, no regala demasiado. Es la típica sesión donde la recuperación física es el ABC de la jornada. Eso sí, independientemente de cuestiones laborales, en el "decano" sobran sonrisas.

El triunfo sobre Huracán, sumado al descanso de dos días, fueron un todo para un plantel decidido a comerse vivo al gran cuco de la divisional, Banfield. Es más, aunque no se lo confirme en palabras, están preparados para la guerra. Por eso, entre chistes y palabras empalagadas de ironía amistosa, los defensores hablan del rival con respeto pero también dejando en claro que ellos no son menos que nadie. "Banfield no es solo un hombre, Banfield tiene su forma de jugar", explica Javier Malagueño ante la pregunta de un colega sobre lo peligroso y feroz que puede ser el goleador del "taladro" y del torneo, Andrés Chávez.

Y cuando LG Deportiva le consulta con un guiño al lateral si la zaga va a recibir a los delanteros (Chávez, Salcedo y Noir) con alguna atención al tobillo, Malagueño dibuja la respuesta con gracia. "Ja, vamos a ver cómo se presenta el partido, pero es la idea; estar siempre cerquita, firmes y que ellos sientan que estamos ahí, al pie del cañón". ¿Entonces va a haber regalito? "Esperemos que sí y que no nos saquen amarilla, ja", dice con toda la onda del mundo el mendocino. "Ellos vienen muy bien, pero nosotros estamos ilusionados de que vamos a sacar los tres puntos", confía. Si hay algo que hoy dispone Atlético y su tropa es fe.

"Estoy confiado en el plantel que tenemos, en nuestras condiciones y de que vamos a regalarnos una alegría. Ellos en defensa están muy bien, y nosotros bastante sólidos en ese aspecto. Van a salir a buscar el partido como lo hacen en todas las canchas y nosotros vamos a tratar de hacer nuestro juego buscando el arco rival sin descuidar la parte defensiva, que hasta ahora nos ha dado nuestros frutos", sostiene Malagueño, dispuesto a todo, cuando de cuidar el arco de Cristian Lucchetti se refiere.

Si los defensores tienen mañas, imagínese los puntas. Una marca en forma de medialuna cicatriza lentamente sobre el pecho de Malagueño. Es una herida de batalla reciente. El 2-0 sobre el "globito" dejó sus marcas. "Sí, sí, se ve que estaban con las uñas largas los delanteros, ja, ja", se toma con calma la situación.

Detrás suyo llega Nicolás Romat, uno de los dichosos que aprovechó las mini vacaciones para recargar pilas. Para su lamento, no pudo estar con su familiar (por la distancia) pero igual la pasó bien. Zafó de ir preso, dice (quería pescar en El Mollar y había veda). LG lo alertó. "Ja, sí", reconoce el "Samurai", que replica su apodo. "Será porque le pego a todos, ja", dice sacándose de encima su gran momento. En Atlético están de buenas y juran que la harán valer por mucho tiempo. Atención Banfield.