El dolor popular se manifestó en el Congreso

El dolor popular se manifestó en el Congreso

Ante el féretro desfilaron ex presidentes, dirigentes políticos, legisladores y concejales, gobernadores y miles de ciudadanos comunes.

ESPERA SILENCIOSA. Miles de personas rodearon el edificio del Congreso de la Nación, conformando largas filas, para darle un último adiós al líder radical.  DYN ESPERA SILENCIOSA. Miles de personas rodearon el edificio del Congreso de la Nación, conformando largas filas, para darle un último adiós al líder radical. DYN
02 Abril 2009

Buenos Aires.- Miles de personas se acercaron ayer al Congreso para despedir al ex presidente Raúl Alfonsín, que falleció el martes, a tal punto que se decidió que las puertas del Parlamento permanezcan abiertas toda la madrugada de hoy para permitir el libre ingreso de la gente que quiere darle el último adiós al líder radical.
Por la capilla ardiente ubicada en el Salón Azul del Senado pasaron las personalidades del Gobierno y de la dirigencia política, que compartieron el escenario político desde la década del 50.
Toda la familia del líder radical, incluido uno de sus seis hijos, Ricardo Alfonsín (el único que lo acompañó en la política), estuvo presente en salón Azul, desde las 8, cuando se inició el velatorio. Concurrieron, entre otros, los ministros Carlos Tomada y Aníbal Fernández; el jefe de Gabinete, Sergio Massa; la dirigente de la Coalición Cívica, Elisa Carrió; el jefe del Gobierno porteño, Mauricio Macri; los dirigentes de la CGT, Hugo Moyano y Omar Viviani.
En horas de la tarde llegó al Congreso el presidente de Uruguay, Tabaré Vázquez, quien viajó especialmente. Lo mismo hicieron los ex presidentes de Brasil, José Sarney y Fernando Henrique Cardoso. También despidieron a Alfonsín el gobernador Daniel Scioli; el ex presidentes de Uruguay, Julio Sanguinetti; el ex canciller Dante Caputo; los ex presidentes Carlos Menem, Eduardo Duhalde y Fernando de la Rúa; los gobernadores de Santiago del Estero, Gerardo Zamora, de Salta, Juan Manuel Urtubey, de Catamarca, Eduardo Brizuela del Moral, además de dirigentes radicales y familiares del ex presidente, entre otros.
Asimismo, desde la mayoría de los países de América latina y del mundo se recibieron palabras de elogio para Alfonsín, de 82 años, resaltando su rol indiscutido en la restauración y en la consolidación de la democracia en la Argentina.
Desde las primeras horas de la jornada de ayer, miles de personas se acercaron al Congreso, cuyas adyacencias fueron cortadas al tránsito vehicular. Gente de distintas edades y grupos sociales formó interminables hileras por Entre Ríos y su continuación, Callao, para despedir los restos del ex presidente. Había banderas radicales, partido al que abrazó Alfonsín desde su juventud, de la Juventud Radical, de Franja Morada, fotos del ex mandatario y también banderas argentinas. El incesante paso de dolientes se hizo en orden. El público que ingresaba de la calle veía el féretro desde atrás de una valla, mientras que las personalidades, personal del Congreso e invitados especiales podían rodear el ataúd y acercarse a los restos mortales del ex presidente radical. En los alrededores del ingreso al palacio legislativo fueron depositadas las numerosas coronas florales con múltiples mensajes.
En el interior del Salón Azul sólo se colocaron tres coronas: una de la Convención Radical, otra de Cobos y de la familia, y la tercera del presidente de la Cámara de Diputados Eduardo Fellner. Las luminarias de la cúpula del Congreso permanecieron encendidas durante el día y la bandera del Parlamento estaba izada a media asta, tal como lo dispuso el Gobierno al decretar tres días de duelo nacional. La familia Alfonsín invitó ayer a toda la ciudadanía a participar del acto oficial y a la Misa de cuerpo presente que se realizarán hoy, a partir de las 10. (NA-Télam)

Palabras entrecortadas

“Nunca me consideré adversario de Alfonsín. En nuestra primera reunión, él como presidente y yo como gobernador, acordamos que había que reformar la Constitución. Nos conocimos y creció mi admiración por él”. Antonio Cafiero, dirigente peronista.

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“A los hombres públicos hay que asociarlos con valores, y en un momento en el que se cree tan poco en la decencia, Alfonsín es la imagen de la decencia pública”. Mario Negri (UCR-Córdoba).

“Estaba dispuesto a dejar la vida para cumplir el mandato popular que le confiaron en el 83. Hizo del diálogo, la convivencia y la tolerancia un culto”. Federico Storani, dirigente radical.

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“Es un día que duele. La bohnomía que tuvo Alfonsín conmigo la tuvo con todos; para conversar, se notaba su carácter fuerte y para ejercer el liderazgo”. Eduardo Angeloz (ex gobernador-Córdoba).

“Ojalá que este doloroso episodio sirva para refrescar la memoria y para buscar la paz desde el Gobierno y las instituciones”. Hugo Biolcati, titular de la SRA.

“Era un hombre que trasmitía sus ideas con firmeza, claridad y bondad; ojalá que su recuerdo genere unidad en la dirigencia argentina”. Hugo Moyano (CGT).

“Estoy apenado por la muerte de Alfonsín, un hombre de la ley y la democracia que luchó para que volvamos a tener este estilo de vida”. Carlos Menem, ex presidente.

 

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