Los“decanos” exhibieron todo su poderío ofensivo

Había que ganar como fuera. El premio era recuperar un lugar en la zona de Promoción y demostrarle al público que tiene muy bien puesta la chapa de candidato. Esos fueron motivos suficientes para que Atlético presentara un equipo netamente ofensivo, que le permitió conseguir una victoria incuestionable.
Héctor Rivoira no le temió al desafío y puso en el campo el tradicional 3-4-1-2 que tantas alegrías le dio durante el certamen. Se jugó en serio y probó a Nicolás Castro como enganche. Y el “Flaco” no lo defraudó, porque fue un engranaje fundamental para conseguir este triunfo que tanto invita a soñar. El plateísta, el que siempre encuentra algún motivo para renegar, ni se acordó después de varios encuentros de la ausencia de Claudio Sarría.
Castro se asoció muy bien con Damián Musto que, además de marcar, cuando tiene la pelota en su poder la administra correctamente y no tiene problemas para ser la rueda de auxilio en la creación cuando él o los responsables de cumplir con esa función desaparecen de escena.
Pero la de ayer fue una noche muy especial. Por primera vez en lo que va del certamen, los tres delanteros que estuvieron en la cancha festejaron un gol. Abrió la cuenta Luis Miguel Rodríguez, después anotó Leopoldo Gutiérrez y puso el broche de oro Juan Pablo Pereyra, que convirtió su primer tanto con la camiseta de Atlético. Todo un lujo que debe ser tenido muy en cuenta, porque se quebró la sequía para dos “nueve” que tiene Rivoira en el plantel. En tanto, Lujambio se recupera.
César Montiglio y Sebastián Longo no celebraron, pero inquietaron, especialmente el primero, por los laterales. Son las otras dos cartas clave con las que cuenta “Chulo” para triunfar.
En total, el “decano” contó con siete situaciones de gol, pero concretó tres. Disparó nueves veces al arco y Juan Olave detuvo seis envíos, mientras que los restantes fueron desviados. Más allá de las oportunidades desperdiciadas, lo importante es que Atlético demostró que, cuando quiere, tiene herramientas para atacar al rival. Si hasta el mismísimo Javier Páez se anima a gambetear para perforar la defensa adversaria. Con esa mentalidad es mucho más fácil ganar partidos.

El ataque
9 tiros al arco efectuó Atlético. Olave atajó seis.

0 No le marcaron off-sides a lo largo del encuentro.

6 córners tuvo a su favor, pero inquietó sólo en dos.

4 veces sus delanteros quedaron frente a Olave.

12 centros realizó. Sólo en uno llevó peligro.

1 penal le cometieron, a Montiglio. No fue sancionado.


Artillero
13 goles lleva convertidos el “Pulguita” Rodríguez en el certamen.

Triplete
1 tanto anotó cada uno de los delanteros que estuvo en la cancha.

Supremacia
7 situaciones claras generó el “decano”. Aprovechó tres de ellas.