18 Marzo 2009
DEBATE. Los gremialistas perdieron la chance de reunirse esta mañana. LA GACETA/JOSE NUNO
La reunión que los taxistas habían planeado realizar esta mañana con un grupo de concejales de la capital finalmente no se concretó. Tras una serie de discusiones entre los gremialistas del sector y una posterior reunión con los funcionarios, los choferes concertaron una nueva entrevista para el miércoles de la semana que viene.
A las 9.30, los taxistas se reunieron en la plaza Urquiza desde donde marcharon en caravana hasta las puertas del Concejo Deliberante. Allí debían reunirse con los ediles que integran la Comisión de Transporte, presidida por Teresa Felipe de Heredia (PJ). Ante ella, pretenden exigir un aumento de los precios de la bajada de bandera y de la ficha.
Sin embargo, los cinco gremios que nuclean a los conductores no llegaron a un acuerdo sobre si entrarían a la reunión juntos o separados y, cuando lo hicieron, los concejales ya se habían retirado. Finalmente, el presidente del Concejo, Ramón Santiago Cano (PJ), y Felipe de Heredia les prometieron agendar una nueva cita para la semana próxima.
Los taxistas exigen que la bajada de bandera, que ahora cuesta $ 2, aumente a $ 2,50, y que la ficha por cada 100 metros de recorrido pase de $ 0,12 a $ 0,20. Además, reclaman mayor seguridad para circular durante las noches y más paradas tubo en el centro, según detalló Miguel Frías, titular del Sindicato de Peones de Taxis.
Sin embargo, fuentes del Concejo ya anticiparon que no hay posibilidades de subir la tarifa y que la mayoría de los ediles no tienen intención de acceder al pedido. "No es el momento de sumar un nuevo gasto a la población", alegaron.
Tampoco se descarta que los dueños de los autos de alquiler soliciten prórroga para la renovación de las unidades, ya que en abril pueden quedar unos 800 vehículos fuera del sistema, por tener más de 14 años de antigüedad. LA GACETA ©
A las 9.30, los taxistas se reunieron en la plaza Urquiza desde donde marcharon en caravana hasta las puertas del Concejo Deliberante. Allí debían reunirse con los ediles que integran la Comisión de Transporte, presidida por Teresa Felipe de Heredia (PJ). Ante ella, pretenden exigir un aumento de los precios de la bajada de bandera y de la ficha.
Sin embargo, los cinco gremios que nuclean a los conductores no llegaron a un acuerdo sobre si entrarían a la reunión juntos o separados y, cuando lo hicieron, los concejales ya se habían retirado. Finalmente, el presidente del Concejo, Ramón Santiago Cano (PJ), y Felipe de Heredia les prometieron agendar una nueva cita para la semana próxima.
Los taxistas exigen que la bajada de bandera, que ahora cuesta $ 2, aumente a $ 2,50, y que la ficha por cada 100 metros de recorrido pase de $ 0,12 a $ 0,20. Además, reclaman mayor seguridad para circular durante las noches y más paradas tubo en el centro, según detalló Miguel Frías, titular del Sindicato de Peones de Taxis.
Sin embargo, fuentes del Concejo ya anticiparon que no hay posibilidades de subir la tarifa y que la mayoría de los ediles no tienen intención de acceder al pedido. "No es el momento de sumar un nuevo gasto a la población", alegaron.
Tampoco se descarta que los dueños de los autos de alquiler soliciten prórroga para la renovación de las unidades, ya que en abril pueden quedar unos 800 vehículos fuera del sistema, por tener más de 14 años de antigüedad. LA GACETA ©
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