

Los docentes del Instituto Güemes analizaron los efectos de la diversidad de tendencias entre los estudiantes que, muchas veces, generan violencia física y verbal. El caso más representativo de este problema es el enfrentamiento de grupos conocidos como “tribus urbanas”, que están liderados por jóvenes que imitan roles y modelos que brindan los medios de comunicación. Dijeron que las burlas conllevan a que, muchas veces, la víctima tenga que abandonar la escuela.
Respecto del uso de uniformes en las escuelas públicas, ítem que también está incluido en el debate, muchos docentes están de acuerdo en que no se debe condicionar el ingreso y la permanencia del alumno en la escuela por la ropa que usa. Opinaron que aunque el delantal es el elemento igualitario en la educación pública, en la secundaria, los chicos se cansan del delantal y optan por asistir a clases con el clásico vaquero, las zapatillas y la remera. “Pero, en general, terminan adaptándose; el problema se da cuando la escuela no tiene tolerancia ante estas situaciones; hablándoles y con paciencia comprenden el porqué de las normas”, opinó Cecilia Arquez, vicerrectora de la Escuela de Comercio Miguel Lillo.







