En Tucumán exigieron justicia por el crimen de Kosteki y de Santillán

En Tucumán exigieron justicia por el crimen de Kosteki y de Santillán

El acto central de homenaje se desarrolló en el puente Pueyrredón, en Buenos Aires.

CONTRA LA IMPUNIDAD. Los manifestantes tucumanos marcharon por 25 de Mayo hasta la plaza Independencia. LA GACETA / ANALIA JARAMILLO
27 Junio 2007
Organizaciones sociales, políticas y de derechos humanos realizaron anoche en la plaza Independencia un acto en reclamo de justicia, a cinco años del asesinato de los piqueteros Maximiliano Kosteki y Darío Santillán. La movilización coincidió con la marcha de los martes que realizan los Familiares de las Víctimas de la Impunidad, a 14 meses de la muerte de Paulina Lebbos.
En Buenos Aires el acto se llevó a cabo en el puente Pueyrredón y fue encabezado por Alberto Santillán, padre de Darío, y Vanina Kosteki, una de las hermanas de Maximiliano. Comenzó después de las 15, cuando la Gendarmería liberó -tras una prolongada negociación- el paso de los manifestantes, que desde las 13 se encontraban apostados en el acceso al puente.
Alberto Santillán leyó el documento consensuado por las organizaciones convocantes al acto en el que se reclamó juicio y castigo a los responsables políticos de la “Masacre de Avellaneda”, por la represión policial del 26 de junio de 2002. Exigieron además -según consigna DyN-, juicio y castigo a los responsables de la desaparición de Jorge López, del secuestro de Luis Gerez y del asesinato del docente Carlos Fuentealba, en Neuquén.
También en Tucumán se leyó un documento consensuado con exigencias similares, fuertes críticas a las políticas social y de seguridad del gobierno de José Alperovich, y un repudio a la represión que sufrieron los jubilados tucumanos. Por su lado, el padre de Paulina, Alberto Lebbos, también fustigó al gobernador: “se llena la boca de derechos humanos y no hace nada para que haya justicia y verdad”. “Puede que tenga impunidad ante los poderes Judicial y Legislativo, pero nunca tendrá impunidad ante el pueblo”, aseguró. Entonces se volvió a escuchar el cántico -como en las jornadas de diciembre de 2001- “que se vayan todos”.
Casi un millar de manifestantes marcharon desde plaza Urquiza hacia plaza Independencia. Llamó la atención el fuerte despliegue policial alrededor de la casa de Gobierno y del principal paseo de los tucumanos. Al igual que en Buenos Aires, no hubo incidentes.

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