Una bailarina asegura que la danza permite expresar los sentimientos

Carolina D’Urso ingresó al Ballet Estable a los 15 como primera bailarina, y luego de un largo alejamiento regresó, y en 2003 volvió a ocupar el cargo de primera bailarina.
En su larga trayectoria interpretó piezas como “Giselle”, “El lago de los cisnes”, “La bella durmiente”, “Cascanueces”, “Pulsaciones” y “Las sílfides”. Pero a la hora de elegir se queda con “Don Quijote”, que bailó con las primeras figuras del Teatro Colón, con Alejandro Parente. “Sí -reconoce-, me quedan como algo pendiente obras como “La Esmeralda”, “Espartaco” y “Romeo y Julieta”.
Convencida de que la danza es el arte de expresar sentimientos a través de los movimientos, manifiesta que “la técnica del ballet es fascinante y rigurosa. Me agradan los movimientos suaves y etéreos pero también los de gran virtuosismo; creo que un bailarín que puede alcanzar las dos cosas es un profesional dúctil”.
Cuando se la consulta sobre la situación del elenco estable, responde: “estamos en un momento bastante difícil, ya que somos muy pocos. Por esa circunstancia es difícil abordar obras enteras del repertorio clásico, lo cual limita la actividad”.
Ante una pregunta, D’Urso afirma que sin bailarín, un coreógrafo no puede llevar a cabo la obra: “por lo tanto, los dos son importantes”.
La rutina de D’Urso son las clases diarias de una hora y media o dos, haciendo ejercicios en la barra y posteriormente en el centro. “Las clases son para una bailarina lo que el entrenamiento para un deportista”, dice. “En esta profesión hay mucho desgaste físico; entre los ensayos y los nervios de la función, si uno no se alimenta bien, no tiene la energía suficiente”.

- ¿Cuáles diría que son  las diferencias entre el ballet clásico y el contemporáneo?
-Actualmente la tendencia es   a minimizar las diferencias entre  estos dos tipos de danzas; esto cuando hablamos de coreografías que se crean hoy en día. Pero si hablamos de obras del siglo XIX encontraremos muchas  diferencias, en general al comienzo de la danza contemporánea se trabajaba desde los movimientos naturales y la danza buscaba la estilización del movimiento. De todas formas, depende del coreógrafo y de la tendencia estética que utilice.