La posibilidad de un acercamiento entre el gobernador José Alperovich y el vicegobernador Fernando Juri debe depender, en buena parte, de que el titular de la Legislatura desista de la acción judicial que impulsa para la puesta en vigencia de las cinco leyes polémicas, resistidas por el Poder Ejecutivo. Esta estrategia fue analizada en la reunión que mantuvieron ayer los legisladores alperovichistas (PJ y aliados), previa a la cena de anoche con el mandatario en la cual le acercaron sus opiniones.
En el encuentro acordaron exigir una redistribución de los espacios políticos en el bloque que preside el jurista Rodolfo Ocaranza (se multiplican las versiones de una inminente fractura) y plantear una redefinición del manejo de los recursos parlamentarios.
José Alberto Cúneo Vergés fue el vocero elegido por sus pares para sintetizar lo debatido. Remarcó que lo central en un acuerdo entre Alperovich y Juri será garantizar la gobernabilidad, para lo cual consideró indispensable “terminar con las leyes de imposible cumplimiento, que tienen un alto costo ante las posibilidades de la Provincia o porque operativamente existe otro mecanismo legal vigente”.
¿Juri debe retirar su planteo de la Justicia?, se le consultó. “Sería loable que lo hiciera como parte de un entendimiento político. El gobernador lo debe tener claro, porque un arreglo con Juri debe, naturalmente, contemplar una situación de esa naturaleza”, contestó. Resaltó, además, que todos los parlamentarios llegaron a sus bancas gracias a los votos emitidos por los ciudadanos, y que no le deben nada a Juri. “No fuimos graciosamente designados por él, para que se tome atribuciones como lo vino haciendo”, sostuvo.
“Hay una fuerte decisión en el sentido de conformar una bancada con identidad propia, siempre que Alperovich esté de acuerdo, porque es casi imposible continuar, y la convivencia es insoportable por momentos. Todo será consensuado con el gobernador”, manifestó.