12 Diciembre 2006
INTOLERANCIA. Pinochetistas y detractores se enfrentaron nuevamente. REUTERS
Santiago.- El ministro del Interior de Chile, Belisario Velasco, explicó ayer que no se decretó un funeral de Estado como ex presidente para Augusto Pinochet porque no reunía los requisitos necesarios para ello, ya que fue un dictador. “Pinochet va a pasar a la historia como el clásico dictador de derecha que violó gravemente los derechos humanos y que se enriqueció. Esa ha sido la tónica de los dictadores de derecha en América Latina”, aseguró.
Por su lado, la presidenta chilena Michelle Bachelet -más cauta- dejó entrever que no dispuso un funeral de Estado para Pinochet porque pensó en el país. “En una sociedad, en un país, cuando no existen normas, leyes previstas para determinadas situaciones, los líderes, los gobernantes, tenemos que decidir pensando en el país”, afirmó la mandataria, evitando la mención directa del sepelio de Pinochet.
“En las últimas horas hemos visto gestos de división que no nos gustan, pero sé que tenemos como país y como sociedad la fortaleza ética para lograr el reencuentro”, señaló, en alusión a las manifestaciones de dolor y de júbilo que estallaron desde el domingo, entre los partidarios y detractores del ex presidente de facto, en la capital.
Ante ese marco, Bachelet instó a la reconciliación nacional con justicia incluida, en referencia a los incidentes entre detractores y partidarios del dictador, que dejaron un saldo de 49 policías lesionados y 99 detenidos. Ayer, grupos antagónicos se enfrentaron en las inmediaciones de la Escuela Militar, donde velaban los restos del dictador.
“¡Asesino!, gritaron algunos detractores que pasaban por el lugar, que terminaron refugiándose en un edificio cuando pinochetistas salieron en su persecución. El incidente terminó con ventanas destrozadas en un edificio en construcción.
En tanto, en la comuna de Pañaloen, nueve carabineros resultaron heridos y cuatro personas fueron detenidas tras un enfrentamiento con 500 pobladores que salieron a celebrar la muerte de Pinochet.
En tanto, el hijo menor del ex general, Marco Antonio, consideró que su padre merece recibir honores de jefe de Estado. “Le corresponden, porque se entregó por este país y lo sacó de un caos tremendo”. afirmó. (AFP-Reuter)
Por su lado, la presidenta chilena Michelle Bachelet -más cauta- dejó entrever que no dispuso un funeral de Estado para Pinochet porque pensó en el país. “En una sociedad, en un país, cuando no existen normas, leyes previstas para determinadas situaciones, los líderes, los gobernantes, tenemos que decidir pensando en el país”, afirmó la mandataria, evitando la mención directa del sepelio de Pinochet.
“En las últimas horas hemos visto gestos de división que no nos gustan, pero sé que tenemos como país y como sociedad la fortaleza ética para lograr el reencuentro”, señaló, en alusión a las manifestaciones de dolor y de júbilo que estallaron desde el domingo, entre los partidarios y detractores del ex presidente de facto, en la capital.
Ante ese marco, Bachelet instó a la reconciliación nacional con justicia incluida, en referencia a los incidentes entre detractores y partidarios del dictador, que dejaron un saldo de 49 policías lesionados y 99 detenidos. Ayer, grupos antagónicos se enfrentaron en las inmediaciones de la Escuela Militar, donde velaban los restos del dictador.
“¡Asesino!, gritaron algunos detractores que pasaban por el lugar, que terminaron refugiándose en un edificio cuando pinochetistas salieron en su persecución. El incidente terminó con ventanas destrozadas en un edificio en construcción.
En tanto, en la comuna de Pañaloen, nueve carabineros resultaron heridos y cuatro personas fueron detenidas tras un enfrentamiento con 500 pobladores que salieron a celebrar la muerte de Pinochet.
En tanto, el hijo menor del ex general, Marco Antonio, consideró que su padre merece recibir honores de jefe de Estado. “Le corresponden, porque se entregó por este país y lo sacó de un caos tremendo”. afirmó. (AFP-Reuter)
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