18 Septiembre 2025
Damián Martínez palpitó el partido contra el "Millonario". Analía Jaramillo/LA GACETA.
Atlético transita una semana intensa en la previa de un partido que promete ser uno de los más exigentes del semestre. Mañana, en el Monumental, el “Decano” recibirá al líder River, un rival de jerarquía que llega con chapa de candidato y con la mochila de ser protagonista en todos los frentes. En ese escenario, Damián Martínez, lateral derecho del equipo, analizó el presente del plantel, sus desafíos personales y la importancia de hacerse fuerte de local.
El defensor compite por el puesto con el uruguayo Maximiliano Villa, con quien viene alternando de manera continua en el “11” inicial. Esa competencia interna, lejos de incomodarlo, la entiende como una motivación para elevar el nivel. “Los resultados nos vienen acompañando, pero hay que seguir trabajando, mejorando en lo individual y en lo colectivo. Hay algunos detalles que nos están costando caros en los partidos, pero ya pasaron. Ahora tenemos un partido importante el sábado y necesitamos hacernos fuertes de local, dejar los tres puntos en Tucumán”, aseguró.
El último partido
En su repaso de la actuación reciente frente a Newell’s, Martínez fue autocrítico con los momentos en los que el equipo perdió intensidad. “En varios partidos nos venía costando arrancar de la mejor manera, pero contra Newell’s tuvimos tres situaciones de gol y estábamos bien parados. En el segundo tiempo cedimos mucho terreno, nos metimos atrás y dejamos que ellos empiecen a conducir. Cuando cedés tanto, el rival genera situaciones y puede pasar lo que pasó: el gol de pelota parada y el segundo, cuando ya estábamos desarmados buscando el empate”, analizó.
El lateral insistió en que Atlético debe sostener la concentración durante los 90 minutos. “Hay que seguir trabajando, sabiendo que tenemos que sumar y mantenernos muy enfocados”, remarcó.
River, el desafío
El duelo frente al “Millonario” genera una expectativa especial. “Sabemos la clase de partido que es, la jerarquía de sus jugadores. Cualquiera que juegue en River podría estar en nuestro equipo. Hay que estar muy atentos. Son partidos lindos para jugar, para dejar atrás las derrotas y volver a sumar”, subrayó Martínez, con una mezcla de respeto y entusiasmo por lo que se viene.
El aprendizaje
El defensor también se refirió al gol en contra que protagonizó frente a Gimnasia, que significó la derrota del “Decano” en el “Bosque”. “Son jugadas desafortunadas, muy rápidas, en las que tenés que decidir en un instante. Se habló mucho de un taco, pero en realidad quise rechazar mal con la parte interna. El fútbol a veces es ingrato; podés estar haciendo un gran partido y cometer un error que cuesta caro. Lo importante es reponerse rápido, corregir y concentrarse mejor. Creo que en el último partido estaba haciendo un buen trabajo y así se sale de esas dificultades”, reconoció.
Martínez no esquiva la responsabilidad que implica jugar en la última línea. “Los defensores siempre vivimos con esa carga. Hay que estar fuertes y seguir laburando. Cuando perdemos, somos los más apuntados, pero sabemos que el equipo en general tiene que mejorar en la definición. Nos está costando concretar las situaciones que generamos. Es un trabajo en conjunto: los delanteros necesitan confianza para volver al gol y nosotros debemos sostener los partidos desde atrás”, afirmó.
La localía
El experimentado lateral también resaltó la importancia del compromiso colectivo. “En definitiva, esto es un trabajo en equipo. Ojalá que el sábado podamos hacerlo bien. Sabemos que con nuestra gente nos hacemos fuertes y que podemos regalarles un triunfo. Eso es lo que todos queremos”, expresó.
En un momento clave de la temporada, Martínez transmite un mensaje de calma y convicción. Atlético necesita sumar para afirmarse en la tabla del Clausura y cortar con la irregularidad. El partido contra River aparece como una oportunidad para dar un golpe anímico, respaldar la idea de Lucas Pusineri y recuperar la confianza plena.
Mientras tanto, en el plano individual, Martínez asume el reto de competir con Villa y demostrar que tiene condiciones para consolidarse como dueño del lateral derecho. La competencia interna, lejos de ser un problema, es vista como una herramienta de crecimiento.
“Siempre hay que estar preparado. Sabemos que el fútbol no da respiro y que los partidos se definen en detalles. Por eso lo más importante es trabajar, estar concentrados y confiar en lo que hacemos. River será un partido exigente, pero también una linda oportunidad para volver a sonreír”, concluyó el defensor.
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